El agua que llega a vecinos del casco viejo de Cáceres supera el nivel permitido de plomo
La asociación vecinal inicia una campaña para recomendar a los residentes que revisen sus tuberías tras analizar 33 viviendas
Una obra realizada el pasado mes de febrero en una vivienda de la calle Arco de España, en el casco viejo cacereño, para cambiar el contador sacó a la luz una vieja canalización de plomo. Sus propietarios decidieron analizar el agua que salía de los grifos de su casa y descubrieron que el nivel de plomo era ocho veces superior a la concentración máxima permitida por la ley (diez microgramos por litro).
Estos residentes expusieron su experiencia a la asociación de vecinos Ciudad Monumental, presidida por Juan Manuel Honrado. El colectivo vecinal decidió entonces informar a todos sus socios y ofrecerles la posibilidad de que también sometieran a análisis el agua de sus viviendas. 33 propietarios se sumaron a esta iniciativa.
Las muestras se tomaron hace tres semanas y el resultado de esos análisis acaba de darse a conocer. En seis de esas 33 viviendas se supera el nivel de plomo máximo permitido por ley. Los datos obtenidos en estas casas van desde los 13 microgramos por litro hasta los 122. En otras 16 viviendas analizadas también se ha detectado plomo en el agua, aunque en estos casos los niveles de plomo están dentro de los límites permitidos por la ley. Algunos de los niveles de plomo más altos se han localizado en casas situadas en la calle Hornillos.
La asociación de vecinos Ciudad Monumental mantendrá hoy, miércoles, una reunión con la concejala de Medio Ambiente, Infraestructuras Estratégicas y Servicios Públicos, Montaña Jiménez, para trasladarle el resultado obtenido en las 33 viviendas analizadas. «Queremos saber qué tipos de tuberías hay en nuestras calles», indica Juan Manuel Honrado. Y, además, pide a la administración que dé facilidades a los vecinos que tengan que cambiar las canalizaciones de su vivienda.
Han sido los propios vecinos los encargados de tomar las muestras en sus casas (una a primera hora, después de toda la noche sin abrir el grifo, y otra tras dejar correr el agua). La asociación las ha recogido y las ha llevado a analizar a dos laboratorios diferentes: al situado en el Colegio de Farmacéuticos y a otro dependiente de la Universidad de Extremadura. Los residentes han pagado 12 euros por cada muestra analizada.
Buzoneo
«No queremos crear alarma», repite el presidente vecinal. Pero la asociación quiere que todos los residentes que puedan estar afectados por este problema se enteren. Por eso, el colectivo iniciará esta semana una campaña de buzoneo en la que distribuirá un tríptico informativo sobre este asunto. En el folleto la directiva anima a los residentes a revisar sus tuberías y, en caso de tener sospechas, les invita a hacer análisis del agua y a comunicarles si sus canalizaciones son de plomo.
«Con el fin de tener una información clara de la magnitud del problema del plomo en el agua potable en la zona monumental, la asociación de vecinos solicita tu colaboración para que nos comuniques si hay conducciones de plomo en tu vivienda», reza el texto. Y, a continuación, explica que en las viviendas antiguas se utilizó frecuentemente el plomo en las conducciones de agua. Actualmente -desde 1980- está prohibido su uso.
«No existe ningún estudio, pero es muy probable que en la zona monumental de Cáceres queden muchas viviendas con este tipo de tuberías. Incluso, aunque se hayan sustituido las tuberías interiores, las acometidas pueden ser de plomo», se expone en el tríptico.
Con la información recabada tras esta campaña informativa la asociación de vecinos tiene la intención de buscar una solución a este problema con el Ayuntamiento y Canal de Isabel II.
El presidente vecinal recuerda que el Real Decreto 140/2003 por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano establece que, antes de 2012, la autoridad local debería haber analizado el agua de las viviendas construidas antes de 1980.