Detenido en Caya con medio millón de euros metidos en una caja de zapatos

La frontera de Caya hace años que se desmontó, pero eso no significa que la Guardia Civil no vigile el tráfico entre ambos países.

El pasado jueves, la patrulla territorial fiscal, que suele operar en esta zona, evitó que un conductor pasara la frontera a las once de la mañana con más de medio millón de euros en el coche.

El dinero se encontraba dentro de una caja de zapatos y de una mochila que encontraron los agentes durante la inspección del vehículo.

El hombre, un vecino de Vigo de 45 años, no llevaba el correspondiente declaración de capitales, necesaria siempre que se va a entrar o salir del país con más de 10.000 euros por persona y viaje.

Cuando los agentes le preguntaron por este documento, el hombre explicó que ignoraba que debía llevarlo y argumentó que la mochila y la caja llena de billetes se debía al cobro de partidas de pescado que había vendida en Córdoba y Sevilla. Aunque este fue su argumento, el supuesto mayorista de pescado tampoco presentó factura alguna de esta venta en las ciudades andaluzas.

Los agentes intervinieron el dinero, comprobaron que se trataba de billetes de curso legal y lo depositaron en la sede del Banco de España de Badajoz, junto al concesionario Peugeot, a la espera de la resolución definitiva del expediente sancionador abierto al supuesto empresario.

El propietario del dinero debe ahora demostrar que los 525.890 euros que llevaba en el maletero de su vehículo tienen procedencia legal.

Se enfrenta a una multa que oscila entre un mínimo de 600 euros y un máximo que alcanza la mitad del medio millón de euros intervenido. Este abanico va a depender en función de las diligencias previas realizadas por la Guardia Civil y de las investigaciones posteriores.

Si durante el proceso se comprueba una clara intención de ocultar el dinero o si finalmente el vecino de Vigo no puede acreditar su origen de forma clara, la sanción puede llegar hasta intervenir definitivamente todo el dinero.

Desde la Guardia Civil recuerdan que una persona puede llevar en efectivo a la hora de entrar o salir de España hasta 10.000 euros como máximo. Si quiere cruzar la frontera con una cantidad superior, el interesado necesita una autorización previa.

También hay que declarar ante las autoridades todo movimiento de dinero en efectivo que supere los 100.000 euros en el interior del territorio español.

Estas medidas de control pretende poner cerco al movimiento de dinero negro tanto en el conjunto nacional como en las fronteras.

Para combatirlos trabaja la patrulla territorial fiscal de la Guardia Civil de Badajoz. Además del movimiento de capitales o droga en la frontera, participan en operaciones que pueden ir desde controlar el patrimonio histórico que entra y sale hasta desenmascarar a transportistas que compran combustible en España y lo venden al otro lado de la frontera.

En el capítulo de la evasión de capitales, la del jueves fue una en la que más dinero se ha intervenido en los últimos meses.

En marzo, por ejemplo, esta misma patrulla detuvo a un hombre de nacionalidad portuguesa cuando intentaba sacar del país una pistola con siete cartucho, y 63.000 euros sin declarar que ocultaba en el interior de sus pantalones.

Antes, en enero identificaron a un vecino de Madrid de nacionalidad china con 150.000 euros que intentaba sacar del país sin declarar a través de la frontera de Caya.

El afectado en este caso llevaba el dinero oculto en el hueco de la rueda de repuesto.

Como ha ocurrido ahora con el vecino de Vigo , argumentó también que ignoraba la cuantía de movimientos de capital que se permitía sacar del país sin realizar la debida declaración. Ante los agentes se limitó a explicar que el dinero procedía de Madrid para comprar género textil en Portugal.

Si se suma el dinero intervenido en estas actuaciones, en lo que va de año la Guardia Civil ha intervenido más de 738.000 euros que se intentaban sacar del país por Caya.