La nueva marquesina del Paseo de Roma se pondrá a principios de septiembre

Desde que se calcinara en marzo de 2023 tras el incendio que se originó en la churrería contigua, unos toldos, bancos y aseos portátiles -de uso exclusivo para los conductores de los autobuses- tratan de suplir la función que la cubierta prestaba a quienes esperan allí para hacer uso del transporte urbano.

La nueva marquesina llegará después de un año y medio del suceso. El Ayuntamiento ha tardado casi doce meses en sacar a concurso el contrato para la adquisición de este mobiliario urbano. Finalmente, en abril de este año, la licitación fue adjudicada a Grupo Reasan Salamanca por importe de 110.715 euros.

Según el pliego, la nueva estructura contará con dos módulos de 3,50x9 y 2,50x9 metros, que harán en conjunto un rectángulo de 6x9 metros.

El nuevo diseño distribuye la superficie en un porche, una sala de espera y tres aseos -uno de ellos adaptado a personas con movilidad reducida-. Asimismo, contará con 25 asientos en el interior y otros 7 en el porche cubierto exterior.

Además de ser un lugar concurrido de la ciudad, es habitual ver a varios autobuses a la vez haciendo parada en el punto del Paseo de Roma donde se ubica la marquesina. Paran las líneas A1 de San Juan, la A2 del Hospital, la B1 de Montealto, la B2 del Paseo de los Rosales, e incluso la de San Andrés y la Antigua, además de la nocturna. Es el punto neurálgico del transporte público.

Aunque con otras características, barrios como Nueva Ciudad también piden la colocación de marquesinas en la calle para resguardar a vecinos y turistas mientras esperan el próximo autobús.