Quitar los aforamientos obliga a reformar el Estatuto extremeño y la aprobación en el Congreso

El secretario general del PSOE extremeño, Miguel Ángel Gallardo, ha anunciado que se ha puesto en contacto con la presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, para iniciar los trámites necesarios y modificar el Estatuto de Autonomía para eliminar los aforamientos. El presidente de la Diputación de Badajoz, procesado por la contratación de David Sánchez, hermano de Pedro Sánchez, prevé tomar este jueves posesión de su escaño como diputado autonómico, tras lo que dimitirá al frente de la institución provincial.

La entrada de Gallardo en la Asamblea implica su aforamiento, con lo que corresponde al Tribunal Superior de Justicia de Extremadura su procesamiento y juicio. Vox ha reclamado que se elimine esa prerrogativa, para lo que ha pedido la intervención del Gobierno regional del PP, ya que el partido de Santiago Abascal no tiene potestad para promover esta iniciativa. Como establece el propio Estatuto de Autonomía y el Reglamento de la Asamblea, la propuesta de reforma corresponde a la Junta de Extremadura, al Congreso de los Diputados o al Senado y al Parlamento regional, para lo que se requiere el voto favorable de al menos un tercio de sus diputados.

La Asamblea de Extremadura cuenta con 65 diputados, con lo que para promover la reforma se requiere el visto bueno de al menos 22. Sólo PP o PSOE alcanzan esa cifra, ya que tienen 28 cada uno. Vox cuenta con cinco y Unidas por Extremadura con cuatro. Como alternativa, el Gobierno regional de la popular María Guardiola podría proponer el cambio.

Pero para aprobar la modificación del Estatuto de Autonomía se requiere una mayoría de dos tercios de los diputados. Es decir, 44 parlamentarios. Una cifra que actualmente sólo se puede alcanzar por el acuerdo entre PP y PSOE, de ahí que el líder socialista haya apelado a la presidenta extremeña.

Por último, la iniciativa debería ser aprobada posteriormente por el Congreso de los Diputados como una ley orgánica, por mayoría absoluta. De esa forma, cualquier reforma requiere un tiempo de tramitación y no sería inmediata. De hecho, la última modificación del Estatuto de Autonomía de Extremadura, de enero de 2011, recibió el visto bueno del Parlamento regional más de un año antes, en septiembre de 2009.

Varias comunidades autónomas han acometido la modificación de sus respectivos estatutos de autonomía para eliminar los aforamientos. Cantabria, Murcia, Canarias, Baleares, La Rioja y Aragón han suprimido esta prerrogativa para sus diputados y miembros del Gobierno regional, lo que implica que puedan ser juzgados por tribunales de justicia ordinarios.