Una norma del Gobierno ha flexibilizado la posibilidad de traer a temporeros foráneos
La contratación de trabajadores extranjeros se regula través de la llamada gestión colectiva de contrataciones en origen. La orden Gecco, por resumir. A finales del año pasado, el Gobierno, a través del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, publicó la nueva orden para 2025. Y llegó con cambios bien recibidos por las empresas agrarias. Entre ellos, la modificación temporal de los contratos. Antes debía ser de un año natural completo. Ahora no es así. Solo debe contabilizar el tiempo de duración por fecha de inicio y finalización del mismo. Esta contratación podrá realizarse para cubrir «puestos de naturaleza estacional o de temporada».
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La orden concede medidas para la seguridad de los trabajadores, como la renovación de los contratos para las mismas empresas y personas cada año, además de contener los requisitos de los alojamientos que se deben proporcionar a los temporeros. También establece criterios de flexibilidad cuando la temporada se amplía o cuando el trabajador pretende concatenar varias campañas agrícolas sucesivas. En concreto, por hasta cuatro años seguidos.
El programa Gecco contiene las normas necesarias para la contratación, «con derechos y garantías», de miles de migrantes, muchos de ellos mujeres. «Y es un referente internacional dentro de la migración regular, ordenada y segura que promueve el Gobierno, se dice por el Ministerio. En los dos últimos años han sido unas 40.000 las personas que han venido a trabajar de forma temporal a España, unas 19.000 en 2023 y más de 20.000 a lo largo del presente 2024.
Permite responder a las demandas del mercado laboral «con responsabilidad y previsión, garantizando la mano de obra en sectores esenciales, al tiempo que ofrece oportunidades laborales y formación a las personas que vienen una vez regresan a sus lugares de origen».
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