Gallardo ofrece a Guardiola cuatro pactos para que «Extremadura tenga esperanza»

Con un discurso bien estructurado y con una intervención firme y sosegada, el secretario general de los socialistas extremeños ha debutado como líder de la oposición en el debate sobre el estado de la región. Gallardo ha dibujado un panorama bien distinto al que ayer plasmó la presidenta de la Junta en su discurso y ha ratificado su oferta de colaboración con el PP para dar estabilidad a Extremadura.

«Extremadura no es un decorado y por eso esta tierra no se gobierna ni con vídeos ni con filtros en Instagram», le ha dicho Gallardo a Guardiola. «Usted se ha creado una ficción y lo peor es que se cree ese relato de fantasía».

«Los extremeños somos los que más esperamos para ser operados, hay más personas en riesgo de pobreza que antes y más los jóvenes preparados que hacen las maletas y se van porque no ven futuro», ha detallado el líder socialista durante su intervención. «En Extremadura hay personas que lo están pasando mal», ha resumido.

Pero la Junta no está corrigiendo «esta realidad, que no va de opiniones, sino de hechos,» ni llevando a cabo las medidas comprometidas por Guardiola para enfrentarla. «De las 44 que anunció en el debate del año pasado, ha incumplido dos de cada tres; de las 63 propuestas de resolución aprobadas, ocho de cada diez están sin ejecutar».

«Usted está representando una obra de teatro, pero cuando el decorado se cae vemos que hay nada», le ha dicho también Gallardo a la presidenta. «Extremadura se estanca mientras España avanza» y los datos del paro son muestra de ello. «Es cierto que aquí ha bajado, pero lo ha hecho la mitad que con los anteriores gobiernos», los liderados por Juan Carlos Rodríguez Ibarra y Guillermo Fernández Vara, cuyo legado ha reivindicado Gallardo.

Especialmente crítico ha sido el líder socialista con los «olvidos» de la presidenta en su intervención. «A los jóvenes y a la vivienda», dos asuntos claves para el PSOE, «les dedicó dos minutos» y no nombró ni el proyecto de regadía de Tierra de Barros, «porque ya le ha puesto fecha de defunción», ni la gigafactoría de Navalmoral «porque nada han hecho en estos dos años».

Gallardo ha censurado la gestión sanitaria, «más de 100.000 extremeños esperan una primera consulta con el especialista»; en materia educativa, «no crean más plazas públicas de 0-3 en el mundo rural porque su apuesta es más cheques pero no más derechos»; en dependencia, «con una inversión mayor en las residencias privadas con la que crean una Extremadura de dos velocidades»; y en fiscalidad, «sus tres rebajas fiscales suponen un ahorro de 30 euros al año a un trabajador y más de 4.000 a los que tienen gran patrimonio».

El líder del PSOE ha pedido también a Guardiola que asuma sus compromisos en infraestructuras, «toda la culpa no puede ser de Bruselas ni del malvado Sánchez» y que sancione a la empresa responsable de cada avería de tren «si quiere dignidad ferroviaria».

Frente a la mala situación en la que se encuentra la región, a juicio del PSOE, fruto de una inacción y falta de gestión, Gallardo ha ofrecido la colaboración de su partido para dar estabilidad a la comunidad y una reforma del Estatuto de Autonomía para plasmar los pactos que ha propuesto.

En juventud, dedicar el 1% de presupuesto a los proyectos empresariales de jóvenes de menos de 30 años, deducciones a las empresas que apuesten por ellos y un plan de viviendas 80.000 similar al de 60.000 que desarrollaron los anteriores gobiernos socialistas.

En servicios públicos, ha planteado que se blinde por ley la financiación de sanidad, educación y dependencia, así como las políticas de igualdad y los programas de acogida e inclusión.

Y para defender, proteger y fortalecer la democracia, «que no se mide solo en las urnas», Gallardo propone que «se excluya de la financiación a quienes difundan bulos que atenten contra la veracidad» y la creación de una autoridad independiente que «distribuya la publicidad institucional para que no sea instrumento de propaganda política».

Como en su primera intervención en la Asamblea, el líder socialista ha reiterado que es consciente de que al PP le incomoda su presencia, «pero no he venido a hacer amigos». Lo ha hecho, asegura, para señalar errores, contrastar proyectos, «arrimar el hombro y defender que otra Extremadura es posible, la que cree en los servicios públicos, en una fiscalidad justica, en la cohesión territorial y en la democracia». Y como ayer Guardiola, Gallardo ha cerrado esta mañana su intervención con los diputados socialistas en pie aplaudiéndole.

En su segunda intervención, tras la respuesta de la presidenta de la Junta, el líder de la oposición ha lamentado «que elija el camino del rechazo y el aislamiento», porque Guardiola ha ignorado los cuatro pactos que le había planteado «por el bien común».

Sin levantar el tono ni pronunciar palabras gruesas, Gallardo ha criticado que «el PP recurra a los insultos para tratar de llevar la razón» y ha manifestado su «decepción» por la intervención de la presidenta en el debate. «Yo esperaba un proyecto ambicioso para Extremadura, pero no lo tiene, se dedica todo el día a mirar lo que hicieron otros».

«Yo quiero caminar con usted». El líder de la oposición le ha vuelto a ofrecer diálogo a Guardiola, «y usted se equivoca cuando rechaza los pactos», ha insistido.

Ha puesto ejemplos concretos de personas afectadas por los problemas en sanidad, dependencia, conciliación y oportunidades laborales y ha reiterado su colaboración para resolverlos. «Usted y yo nos podemos querer matar políticamente, pero esto no resuelve nada». Por eso, ha rechazado «llamarla okupa cuando usted me lo llama a mí», tras recordar las renuncias del PP en Don Benito para que la Alcaldía la asuma Elisabeth Medina, y «compararla con Bárcenas como usted ha hecho conmigo con Cerdán, que es un golfo igual».

Gallardo le ha dicho a Guardiola que la considera «una persona decente» y que, por eso, tendrá que pedirle perdón cuando se demuestre que «yo no creé ninguna plaza para David Sánchez», aunque la mochila que lleva por eso «pesa mucho». «De momento usted tiene el cronómetro en marcha a su favor, pero tiempo al tiempo».