La sanción fantasma de Toni Jou en el Badajoz
En las resoluciones disciplinarias no aparece ningún blanquinegro pese a que el balear manifestó que no puede jugar y el técnico asegura que tiene una baja por ese motivo
Si en lo institucional la madeja se enreda hasta límites insospechados en el Badajoz, el apartado deportivo no queda exento esta semana del caos imperante ... con un caso extraño relacionado con una supuesta sanción que acarrea la amarilla que vio Toni Jou en la victoria (1-0) del pasado domingo ante el Numancia en el Nuevo Vivero, en el que, además, fue el autor del único tanto.
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El jugador balear sostuvo en una entrevista concedida a este diario el pasado miércoles que no puede jugar este domingo (12.00 horas) ante el Ursaria en el Polideportivo Dehesa de Cobeña al tener que cumplir el ciclo de cinco amonestaciones, pero no figura en el listado publicado por la Federación Española de Fútbol que detalla los jugadores que se pierden la jornada por temas disciplinarios según la resolución del juez único para competiciones no profesionales.
En ese resumen se recoge la tarjeta que el colegiado andaluz Sevillano Marín le mostró en el minuto 90 en el apartado referido a «formular o realizar observaciones, gestos o reparos al árbitro principal, a los asistentes y al cuarto». Ni rastro de otras consideraciones.
Algo no cuadra, porque si bien pudo tratarse de un fallo del propio Toni Jou al contabilizar el número de amarillas que acumula, la bola del asunto se agranda al sostener el cuerpo técnico la misma premisa, ya que Iñaki Alonso, técnico del Badajoz, deslizó en la rueda de prensa de este viernes que, además de varias dudas por problemas físicos, cuenta con una baja por sanción, aunque no hizo mención explícita sobre de quién se trataba. La realidad es que ni el último goleador del conjunto blanquinegro ni ningún otro futbolista de la primera plantilla pacense aparece entre los afectados por este tipo de incidencia.
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Este diario consultó con el departamento de comunicación del club, que informó de que no poseen otra información que contradiga lo publicado por la RFEF y, por tanto, a esos efectos está disponible.
La única explicación que transmiten desde la entidad extremeña es que pueda tratarse de un lapsus del entrenador (que coincide casualmente con el de Jou hace unos días) y que quisiera referirse a una lesión, pero apostillan que carecen de cualquier detalle sobre posibles percances físicos del mallorquín. Basta con seguir atentamente la comparecencia del preparador de Durango para que esa versión quede desmontada. «Hasta mañana no os puedo decir absolutamente nada, Álex Alegría ha probado durante la semana dos veces y se ha tenido que retirar y sí que es verdad que tenemos alguna baja por sanción, eso es inevitable», fue la secuencia completa, esbozando una sonrisa irónica al abordar ese asunto.
Sobre todo lo que rodea a la actualidad de la entidad, Iñaki Alonso manifestó hace una semana «que desde que he llegado, tanto en las ruedas de prensa de los viernes como en los pospartidos, me habría gustado hablar solo de fútbol, pero no ha sido así», también recalcó que los mexicanos le trasladan a él y a la plantilla tranquilidad de cara al presente y al futuro, pero después de lo ocurrido en los últimos días, la pregunta era obligada de nuevo, ¿siguen sosteniendo ese mismo mensaje de puertas para dentro? «Normalidad, es lo que se me ha transmitido y por eso me gustaría hablar solo de fútbol», dijo serio y taxativo.
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Lanuspe emite un requerimiento para que los mexicanos convoquen la junta
Lanuspe, a través de su administrador único, Javier Peña, ha emitido este jueves un acta de manifestaciones ante notario para urgir a los mexicanos del Badajoz a convocar una Junta General Extraordinaria de accionistas para la entrada de nuevos componentes de la cuerda de Luis Oliver y Agapito Iglesias y la aprobación de una ampliación de capital. En el escrito sostienen que los consejeros están llevando «a la ruina deportiva al club y como consecuencia de ello a la mayor crisis económica sufrida desde su fundación». Los tildan de «okupas» que impiden que «el mayor accionista acceda a los órganos de gobierno». Hacen mención a retrasos en pagos en los salarios de la plantilla y del convenio singular con la Agencia Tributaria, que existen créditos a la masa sin abonar y que no se han aprobado las cuentas en el tiempo hábil, entre otras cuestiones. Y temen «que el club pueda ir a liquidación por la inoperancia» de los consejeros. Si los mexicanos acceden a esa petición, tardaría 60 días en celebrarse la junta desde la convocatoria, que podrían ser más de 100 si es el registrador mercantil es el encargado de hacerlo.
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