La Junta ve insuficiente la documentación presentada para proteger la Sierra de la Mosca de Cáceres

«Durante el encuentro, el Consejo (de la Red de Áreas Protegidas) a la vista del contenido de las alegaciones presentadas en el proceso de información pública, puso de manifiesto la insuficiencia de la documentación existente en algunos aspectos que resultan determinantes para la declaración efectiva de este paraje como paisaje protegido», confirma la Consejería para la Transición Ecológica.

Esto significa que la tramitación requiere de documentación adicional y suficientemente contrastada para continuar con la tramitación administrativa de este expediente. No es la primera vez que ocurre. Ya en enero de 2021, Medio Ambiente advirtió de que la declaración «no estaba suficientemente justificada». En ese pronunciamiento inicial, la Junta reseñaba que se pretendía proteger algunas áreas «con escaso valor natural» y se aludía a terrenos de uso industrial o naves, así como a la «amplia red» de zonas protegidas que tiene Cáceres y a las limitaciones de uso que pone de manifiesto el Plan de Urbanismo. En este sentido, un estudio de la Universidad de Extremadura (UEx) cuestionaba ya la declaración de la Sierra de la Mosca como paisaje protegido.

El documento fue elaborado por el catedrático en Ordenación del Territorio, Julián Mora Aliseda, y plantea que hay más de 500 edificios de carácter residencial, sin que se incluyan los agrícolas o públicos. Ello ha dado lugar a un lugar «antropizado». Decía Mora Aliseda que con los argumentos que exponen quienes defienden la declaración de la protección, «el 97 por ciento del territorio extremeño» estaría protegido. Habla de una «invasión constructiva» de viviendas de recreo con piscinas, lo que desvirtúa esa hipotética declaración.

Ahora lo que resalta Transición Ecológica, una vez recibidas las correspondientes aportaciones en el periodo de exposición pública, es que se requieren al menos cinco informes más para poder refrendar con argumentos la citada declaración. Se refiere, por ejemplo, a un primer documento de carácter técnico que analice «con detalle la posible inclusión de ocho enclaves concretos del paraje». Se pide también un «informe técnico y jurídico de coherencia con el Plan General Municipal de Cáceres». Asimismo, tendrá que determinarse «el valor del paisaje con criterios científicos».

Por último, se exige otro «informe técnico sobre la zonificación prevista, usos permitidos y prohibidos, y afección a la propiedad pública y privada dentro del paisaje protegido». En esa línea, se necesita, igualmente, «un informe jurídico sobre la conveniencia y necesidad de incluir estos nuevos aspectos en el potencial decreto de declaración», detalla la administración autonómica.

Cuando toda esa documentación adicional que se ha solicitado esté lista será cuando el Consejo de la Red de Áreas Protegidas vuelva a reunirse para abordar el asunto. La declaración de paisaje protegido presenta un nivel de rango inferior al de parques nacionales, parques naturales, áreas marinas protegidas y monumentos naturales.

La propuesta inicial sobre la declaración de la Sierra de la Mosca y el Calerizo aludía a su «alto valor geológico, prehistórico, arqueológico y biológico acrecentado por el hecho de encontrarse muy cerca de las poblaciones de Cáceres y Sierra de Fuentes».