Extremúsika disipa las nubes en su jornada inaugural

El festival Extremúsika, que arrancaba este jueves justo a esa hora, la del té se garantizaba de esta forma 72 horas en las que la única protagonista sería la música y el ambiente festivalero. ¿Huevos a santa Clara? ¿Suerte sin más? Fuera lo que fuera al promotor Carlos Lobo vuelve a salirle bien, al menos en lo meteorológico, esta apuesta musical para el otoño cacereño que se lleva a cabo bajo su dirección desde hace cinco años.

Aunque el suelo estaba aún húmedo cuando los primeros festivaleros empezaban a montar sus tiendas, todo apuntaba a que los charcos iban a desaparecer para siempre y los tres escenarios, Don Porky, Mr Bellota y Sra. Cigüeña, iban a acoger la música sin contratiempos.

La cita arrancó tímidamente a con Trinkiboy, un artista almendralejense de hip hop rap y trap. Los platos fuertes se esperaban con la banda de rock Reincidentes, Rulo y la Contrabanda, el Canijo de Jerez y la Plazuela. Antes, a las siete de la tarde encandilaba al público Queralt Lahoz con su propuesta de ritmos urbanos mezclados con flamenco y rap. Ante un auditorio aún escaso Lahoz sacaba pecho de su origen, de formar parte de una familia andaluza emigrante en Cataluña. Se preparaban entre tanto los Antílopez en el escenario Don Porky para descargar su estilo mestizo.

La parte más joven del público se apiñaba en el escenario Mister Bellota para disfrutar de Skinny Flex, un artista urbano de hip-hop de origen marroquí aunque afincado en Cataluña. El público, igual que el cartel, está muy mezclado en Extremúsika, aunque este jueves, primera jornada, proliferaban veinteañeros y madres y padres con grupos de menores. En la zona de acampada y llegados de Arroyo de la Luz estaba un grupo nutrido de jóvenes de entre 25 y 30 años que preparaba todos sus avíos para pasar un fin de semana en tienda de campaña. Javier Mariscal habla por todos sus compañeros, que preparan una bandera extremeña. «El cartel ha flojeado bastante, no han apostado por grupos locales, hay uno en la provincia de Badajoz que se llama 'Sanguijuelas del Guadiana' que lo están petando, son de Extremadura, tenían que estar», aportan. Estos jóvenes, como mucha gente, compraron las entradas en cuanto salieron, al principio, más baratas que ahora. Pese a todo, esperan pasarlo bien. «Esto al final es cultura y hay que aprovecharlo», dicen en mitad de las risas.

Enormes barras completan el recinto de Extremúsika, en donde se pueden adquirir bebidas y comida, también hay puestos con abundante merchandising. Al validar la entrada o el abono se entrega una pulsera que se puede recargar con efectivo o con tarjeta. Si sobra alguna cantidad de dinero se puede recuperar vía web, pero con un recargo de dos euros.

Los conciertos se retoman esta tarde en los tres escenarios. Abre brecha en Mr.Bellota a las cinco de la tarde el joven artista Dudi. Extremúsika ofrece algunos de los nombres que pueden considerarse la locomotora del festival, como Saiko, que actúa a las doce menos cuarto en el escenario Sra. Cigüeña. Es un representante de lo que se llama música urbana Lo hace justo después de Mala Rodríguez y Vicco. Derby Motoreta´s Burrito Kachimba, Mojinos Escozíos o Cristian Varela figuran también en el extenso programa que intenta atrapar a todos los públicos.