Bares de la Plaza Mayor preparan su propia propuesta para las terrazas a petición del Ayuntamiento

El Ayuntamiento se reunió el jueves con los hosteleros de la Plaza Mayor para abordar el problema de la distribución de los espacios de las terrazas. Las quejas se han sucedido en las últimas semanas en la parte baja por las aglomeraciones que se han producido de forma sistemática.

El pasado día 19 de junio la Policía Local ya tuvo que intervenir en la zona próxima a la Plaza del Duque y llevó a cabo un desalojo de personas. No se respetaban distancias de seguridad ni las medidas sanitarias y se intervino en los veladores.

Los empresarios ya asumen que deberán reducir el espacio de sus terrazas. El Ayuntamiento se lo ha hecho saber. A la vez que les ha transmitido que está vigilante para que se cumplan tanto la ordenanza como la normativa de accesibilidad, no plantea ejercer medidas coercitivas, salvo que se vea obligado a ello por los incumplimientos. En este sentido, los propios hosteleros y el concejal de Desarrollo Urbano confirman que el Consistorio ha pedido a los empresarios que presenten una propuesta sobre cómo quieren los veladores, pero siempre que se garanticen la «seguridad y accesibilidad» y no se superen los aforos establecidos.

Desde el colectivo de empresarios de hostelería se indicó ayer que ya se ha encargado la redacción del proyecto a un arquitecto y que la idea es presentarlo al Ayuntamiento en los próximos días.

El titular de Urbanismo y Licencias incidió en que los afectados ya saben que tendrán que «reducir mesas» y se establecerá «un recorrido riguroso que garantice la seguridad y accesibilidad». Según Bello, no es un problema general, ya que «el 95 por ciento de los hosteleros está cumpliendo», pero sí se ha generado una situación conflictiva por la presencia de nuevos elementos en el mobiliario urbano como los separadores de mesas.

En este aspecto, desde el Ayuntamiento se indica que lejos de intimidar a los hosteleros con una presencia policial continua, lo que se pretende es cumplir la normativa.

Se busca conciliar el derecho de los vecinos y comercios, que se han quejado por la falta de espacio para transitar y por las aglomeraciones, con los propios negocios de hostelería, que han pasado un año difícil y aún tratan de recuperarse.

«Se van a reducir terrazas, pero antes de enviar a la Policía o a los técnicos lo que les hemos pedido es que presenten una propuesta que garantice un cumplimiento exhaustivo», refrenda Bello. De momento, ya la están elaborando y quieren presentarla en una próxima reunión.

Desde el colectivo de hosteleros se abunda en lo que apunta el propio Bello sobre el cumplimiento general de la mayoría, aunque algunos negocios han generado problemas por haber extendido sus veladores más de lo que debían. Tanto el Ayuntamiento como los hosteleros creen que por la vía del diálogo se podrá resolver la coyuntura creada, que ha llevado a situaciones delicadas con problemas para cruzar la parte baja de la Plaza Mayor o denuncias como los propietarios de la pizzería de la Plaza del Duque.

Han advertido que a medida que se iban relajando las restricciones se han ido acumulando más personas en los espacios públicos y esa zona llega a quedar «bloqueada» por la presencia de las terrazas. En el Ayuntamiento, el alcalde ya aludió a que se estaría vigilante para garantizar la seguridad.

Sin embargo, la vigilancia por parte de la Policía Local se considera para algunos hosteleros que se les incluye en una lista negra de supuestos incumplidores, cuando no lo son. «No es una lista negra, sino una lista blanca, porque lo que se pretende es que se cumpla la normativa y que todo el mundo pueda desarrollar su actividad como corresponde», avanza Bello. Niega que haya «manía persecutoria» desde el Consistorio a los establecimientos de la zona.

El ejemplo que pone es precisamente que se les haya invitado a hacer una propuesta y que ese plan se estudiará en lugar de proceder a denunciar de forma sistemática. Acumulación de personas, ruido y suciedad son algunas de las quejas que han trasladado los residentes de la Plaza Mayor.

«Queremos buscar una solución con los vecinos y comerciantes y a la vez que los hosteleros, con su propia propuesta, puedan seguir trabajando», concluye el edil de Urbanismo. Un corredor peatonal seguro y accesible y menos mesas parece de momento el camino más claro hacia la nueva imagen de la Plaza Mayor.

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