Los vecinos apuntan a un brasero como el origen del incendio de Talavera

En la calle Juan XXIII, hay una manzana completa de edificaciones de ladrillo visto, dos plantas y dos viviendas por altura. En el primero, que casi es una entreplanta porque solo le separan cinco peldaños de la calle, esta madrugada se desató un incendio que le ha costado la vida a Francisco.

Este trabajador del campo tenía reconocida la incapacidad por una dolencia en una pierna, de la que fue operado antes de la pandemia y que le obligaba a desplazarse con muletas. Era conocido entre sus vecinos, algunos de los cuales se habían criado en el mismo bloque.

Su vecina de planta es una mujer de 91 años, que vive con dos hijos. Solo una de ellas estaba esta madrugada con ella. La hija se despertó al oír un golpe a las seis de la mañana, olió humo y de forma automática despertó a su madre. La sacó con toda la prisa que pudo de la vivienda con la ayuda de otro vecino, la llevaron a la calle y la resguardaron en una casa de enfrente antes de saber exactamente qué estaba ocurriendo.

Había mucho humo también en la planta superior, donde solo vive una mujer mayor. El piso que se encuentra justo encima de la casa de Francisco estaba vacío.

Los primeros que lograron abrir la puerta de Francisco le encontraron justo detrás de la puerta. La versión más extendida entre los vecinos es que se quedó dormido en el sofá con el brasero puesto y que la faldilla ha salido ardiendo. Los vecinos creen que intentó salir de la casa, de ahí que estuviera justo detrás de la puerta.

Los efectivos sanitarios fueron los primeros en llegar y trataron de salvarle la vida a las puertas del bloque. Estuvieron una media hora intentando reanimarle sin éxito. Después llegaron los bomberos y, por último, una dotación de la Policía Científica que ha tomado restos de la vivienda para aclarar el origen de las llamas.

Poco antes de las nueve de esta mañana Francisco ya no estaba en la calle. A las diez las vecinas limpiaban del rellano y de la escalera los pocos restos que quedaban del incendio. El piso de Francisco, explican, ha quedado muy afectado. Sobre todo, el salón y la cocina. En cambio, por la ventana nada hace advertir que esta madrugada el fuego ha vuelto a provocar una muerte ni por la calle se puede adivinar que esta misma madrugada ha habido un incendio en el bloque.