Un encapuchado roba en un bar de San Roque, en Badajoz
El ladrón reventó el cristal de la puerta de La Sentencia y fue capaz de llevarse la caja registradora aunque saltó la alarma
Nuevo robo en un bar de Badajoz de madrugada. Un encapuchado se ha llevado 500 euros tras reventar el cristal de una de las puertas y robar la caja registradora de La Sentencia, en el barrio de San Roque. La alarma saltó, pero el ladrón fue capaz de marcharse con el botín antes de la llegada de la policía.
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Los hechos han tenido lugar a las seis de la mañana de este sábado en el bar La Sentencia (antiguo Lex), que recibe este nombre por estar enfrente de los nuevos juzgados de la Ronda Norte y han quedado registrados por las cámaras de seguridad de este establecimiento.
El local tiene accesos en dos calles, al solar frente a los juzgados (Francisco Sansón Moreno) y a la calle Eugenio García Estop. El ladrón, con la cabeza parcialmente tapada por una capucha, ha llegado por la primera entrada. Primero ha conseguido forzar y levantar la persiana metálica. A continuación ha intentado abrir la puerta haciendo palanca sobre el marco, pero este no ha cedido lo suficiente para que entrase. Finalmente ha reventado el cristal y ha entrado en el local.
En ese momento, poco después de las seis de la mañana, ha saltado la alarma y la empresa de seguridad ha llamado a uno de los empleados de este bar para informar que las cámaras registraban la entrada de una persona encapuchada. El camarero ha confirmado a la empresa de seguridad que no era un trabajador, ya que el cocinero llegaba a las 6.30 y han alertado a la policía.
Agentes de la Policía Nacional han llegado al bar en pocos minutos, pero el ladrón ya se había marchado. En los minutos que ha estado dentro ha conseguido llevarse la caja registradora que contenía unos 500 euros.
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José, camarero de este negocio, ha llegado a las 6.20 horas tras recibir la llamada de la empresa de seguridad. Se ha asustado porque ha percibido movimiento dentro del local, pero eran los agentes de la policía que ya habían llegado a la escena.
Investigación
Una de las cámaras de seguridad ha captado la entrada del encapuchado y se percibe que llevaba guantes. Están analizando más imágenes de otras cámaras en busca de un plano que permita identificar a este ladrón.
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La policía científica, según ha podido saber HOY, ha encontrado huellas de guantes en el cristal reventado. También han tomado posibles muestras de ADN por si el intruso se ha cortado al forzar la entrada.
A las 10.30 horas, más de cuatro horas después del robo, la alarma ha vuelto a saltar. Esto se debe a que la caja registradora que se ha llevado el ladrón cuenta con un botón que permite activar la alarma en caso de atraco. Es posible que el responsable del robo haya activado el botón al manipular la caja para vaciar su contenido o al tirarla para deshacerse de la prueba. La empresa de seguridad ha determinado que la señal de la caja registradora estaba a unos 500 metros de La Sentencia, pero no ha sido localizada por el momento.
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Otros casos en bares
Según ha podido saber HOY, en los primeros pasos de la investigación, el 'modus operandi' de este robo recuerda al que tuvo lugar en la cafetería Tiempo de Café, en Pardaleras, a principios de noviembre. En ese caso, también de madrugada, unos desconocidos reventaron el cristal de este local, entraron y se llevaron la caja registradora entera y unos décimos de lotería.
En el mes noviembre también han sufrido robos de noche varios locales del Casco Antiguo de Badajoz. El primero fue el 14 de noviembre en el bar la Casona Baja, en la plaza de la Soledad. Un hombre con el rostro tapado por un pasamontañas y un casco rompió un cristal pasadas las siete de la mañana y se llevó cerca de 2.000 euros entre la caja registradora y el bote de los camareros,
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Al día siguiente, un joven con el rostro semicubierto por una braga trató de entrar en dos locales de la zona de Muñoz Torrero y finalmente lo logró en la Tapería de Carmen al romper el cristal con una tapa de alcantarilla. Esa misma noche también hubo un robo en Lo Nuestro, en la plaza de los Alféreces.
El 17 de noviembre, además, trataron de robar de madrugada La Casona Alta, en la plaza Alta, pero la presencia de una limpiadora hizo que huyesen los responsables.
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