Condenado el dueño de una agencia por no contratar los viajes pagados por sus clientes
El negocio estaba en Torre de Miguel Sesmero y hubo perjudicados que abonaron hasta 6.000 euros por vuelos o cruceros que no pudieron realizar
El propietario de una agencia de viajes de Torre de Miguel Sesmero ha sido condenado a 21 meses de prisión por un delito ... de estafa continuada consistente en no contratar los viajes que le pagaron más de 20 clientes que en algunos casos supieron que no podrían viajar o pernoctar en el destino elegido cuando se disponían a subir al avión o ya estaban en el hotel.
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El condenado por estos hechos es Jorge M. T., propietario de una agencia domiciliada en Torre de Miguel Sesmero que, prevaleciéndose de la falsa apariencia de desarrollar una actividad empresarial solvente, recibió importantes sumas de dinero de clientes que contrataron viajes que tenían como destino distintos países extranjeros y también ciudades turísticas españolas.
En ese juicio estaba personada como acusación pública el Ministerio Fiscal, que pedía 4 años y medio de prisión por un delito de estafa continuada, y también el letrado pacense Segundo Berjano, que representaba a dos de las personas que resultaron afectadas por la estafa.
La Audiencia Provincial de Badajoz había señalado el juicio para esta semana, pero antes de su celebración se alcanzó una sentencia de conformidad que rebaja la pena a 21 meses de cárcel.
El tribunal que vio el caso ya comunicó en sala que el procesado no tendrá que ingresar en prisión por tratarse de una condena que no supera los dos años de cárcel, un beneficio que sólo se le aplicará si abona íntegramente las cantidades que aún adeuda a algunos de los perjudicados. Al resto ya les ha entregado el dinero que les cobró.
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Entre los afectados se encuentran una mujer que abonó 4.343 euros por un viaje Madrid-Nueva York-Cancún-Madrid que no pudo llevar a cabo después de desplazarse al aeropuerto de Barajas para coger el avión.
Otra de las perjudicadas abonó 2.112 euros por un crucero marítimo que debía iniciarse en Barcelona. Pero cuando viajó a Cataluña para subir al barco comprobó que la agencia no había realizado la reserva, por lo que incurrió en unos gastos de 1.500 euros por su estancia en Barcelona hasta conseguir otro crucero.
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Hubo otra clienta que abonó 2.440 euros por un viaje a Nueva York y la Riviera Maya que tampoco pudo realizar, y un cuarto cliente que abonó 6.250 euros por otro viaje que se disponía a iniciar cuando se percató de que no podía hacerlo.
En algunos casos se trataba de viajes de novios. En otros, el viaje sí se hizo pero no en las condiciones pactadas.
Ahora, la Audiencia de Badajoz impondrá al procesado una pena de 21 meses de prisión, pero permitirá que no ingrese en la cárcel si devuelve todas las cantidades estafadas.
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