Los vecinos de San Roque piden una solución definitiva para los reventones de agua

Reventón tras reventón. Así andan los vecinos de San Roque, especialmente los que viven en la avenida Ricardo Carapeto. Esta calle registra un gran número de averías en las tuberías de suministro de agua potable, lo que provoca múltiples molestias a los residentes y empresarios que se encuentran en esta zona.

En la última semana se han producido cuatro incidentes. Los problemas se localizaron entre la calle Bilbao y García Estop. De hecho, según afirma Ramón Olivenza, presidente de la asociación de vecinos del barrio, la directiva de ese organismo ha recibido múltiples quejas de quienes sufren esta situación.

Por este motivo, la junta directiva de la asociación se reunió el pasado miércoles para elaborar un escrito en el que exponían el problema y reclamaban al Consistorio pacense una solución definitiva. «Lo entregaremos en el registro del Ayuntamiento para que el alcalde y el responsable de esta materia tengan conocimiento de la problemática. Les instamos a que vayan renovando la red, aunque sea por partes. Necesitamos una medida definitiva», indica Olivenza.

Desde el Ayuntamiento explican que las tuberías de la zona se irán renovando «dentro del Plan Director o, si es posible, con remanente».

Para arreglar estas roturas la zona sufrió diferentes cortes en el suministro de agua, tiempo durante el que los vecinos no pueden cocinar, fregar, ducharse o poner la lavadora. Las incomodidades y molestias se agravaban cuando las averías se producen con frecuencia y deja de ser algo puntual. No es la primera vez que la avenida Ricardo Carapeto de San Roque se ve afectada por problemas de este tipo. Durante los últimos años han sido frecuentes las roturas de tuberías. «Yo vivo en un quinto piso y he padecido numerosos cortes de agua debido a los reventones en las tuberías de la red. Lo peor no es sólo eso, sino que me he visto obligada a instalar una bomba porque no tengo presión de agua y el calentador no salta», apunta Michi Rico, una vecina.

Los locales y establecimientos que se encuentran en esta avenida también se ven perjudicados por la interrupción del suministro cuando surge una avería. Una de las que se originó en la madrugada del pasado domingo provocó la inundación del supermercado El Árbol.

Frutería

Lo mismo le ocurrió a Jerónimo Fernández Cordón, dueño de la frutería que lleva su nombre. En otro incidente que se produjo en la red hace unos meses se le anegó la tienda. «Perdí algunos productos que tuve que tirar porque se mojaron y no se podían vender. En uno de los reventones que se registraron esta semana también me vi afectado por los cortes de agua. No te puedes lavar las manos ni fregar el comercio», sostiene. Junto a su establecimiento se sitúa el local de reformas en el que trabaja Noelia Casas. La misma rotura que hace meses perjudicó a Fernández Cordón, inundó también su tienda. «Tuve que cambiar toda la tarima porque se estropeó, además de desmontar los muebles y pintar. Nos vimos obligados a cerrar durante una semana y media», señala.

Los cortes de agua también alteran la actividad de otros negocios como comercios, bares y cafeterías de la zona. «Durante la incidencia no podemos servir café ni refrescos porque la máquina de hacer hielo tampoco funciona. No podemos fregar los baños ni limpiar», dicen desde un bar ubicado en la avenida.

«Estuve todo el lunes sin agua y eso es un destrozo para una peluquería. Una avería no se puede evitar, pero al menos podían haber avisado de que iban a cortar el agua para repararla», manifiesta Luisa Hurtado Martínez, responsable de la peluquería LH.

San Roque no es el único barrio que reivindica una intervención en su red de tuberías. El caso más llamativo es el de Ciudad Jardín, cuyos vecinos sufren reventones desde hace unos siete años. El Ayuntamiento ha renovado el sistema de aguas en varias calles, pero los residentes insisten en que necesitan una intervención general en la zona.

También reclaman reparaciones en las tuberías los vecinos de la Urbanización Guadiana. Por ejemplo en el mes de enero la calle Castillo de Alburquerque sufrió cuatro reventones en una sola semana. Cerca de allí, en Las Moreras también ha habido conflictos por la red y se han realizado varias reparaciones.

Suerte de Saavedra es otro barrio afectado aunque con una solución pendiente porque el Ayuntamiento está tramitando la instalación de un nuevo colector.