Alterar el cuentakilómetros puede ser delito de estafa

Rebajar el número de kilómetros de un vehículo usado es una mala práctica que algunos vendedores, profesionales o particulares, realizan con ánimo de poner un precio mayor del que realmente tendría si el cuentakilómetros marcara los reales y no los ficticios.

Cuando existen sospechas, la Guardia Civil de Tráfico interviene, siendo una buena fuente de consulta los datos que obran en las ITV, ya que cuando un vehículo pasa por ellas se anotan los kilómetros que figuran en el cuadro de instrumentos, reflejándose en el informe, si bien en algunas comunidades autónomas se anotan en la propia ficha técnica. Aunque no tiene un espacio para ello, puede verse junto al sello de la ITV inspectora.

En más de una ocasión el comprador de vehículo se ha visto engañado cuando comprueba que el coche adquirido no tiene los kilómetros que marca el odómetro. Si este comprador denuncia al vendedor antes de que transcurran tres años, puede ser condenado por delito de estafa, castigándose con penas de prisión de seis meses a tres años. Dice el Código Penal en su artículo 248 «cometen estafa los que, con ánimo de lucro, utilizaren engaño bastante para producir error en otro, induciéndolo a realizar un acto de disposición en perjuicio propio o ajeno». También se podría denunciar por infracción al artículo 1.484 del Código Civil donde reza «de haberlos conocido el comprador, no la habría adquirido o habría dado menos precio por ella».

Las formas para comprobar los kilómetros reales de un automóvil son varias, desde el libro de mantenimiento donde quedan reflejadas las fechas de las revisiones periódicas, hasta el taller donde se haya reparado o revisado el vehículo. La manipulación de los cuentakilómetros mecánicos y digitales es muy fácil.

No todos los casos de estafa se resuelven en el juzgado, muchos se cancelan con la resolución del contrato de compra-venta devolviendo mutuamente el dinero y el vehículo; otros exigen indemnizaciones por daños y perjuicios, y los más denuncian en Consumo para que el Sistema Arbitral resuelva.