Las dudas vuelven a los mercados por Grecia y el rescate a España

La incertidumbre ha vuelto a los mercados. La alienta la preocupación por el futuro de Grecia, pero también el retorno a la actividad por parte del Gobierno español, con las expectativas de la solicitud de auxilio global y de un eventual retraso en el cumplimiento de las condiciones para recibir la asistencia financiera que debe aliviar la situación de las cajas en dificultades. La agencia Standard & Poors, no obstante, se ha apresurado a adelantar que mantendrá la calificación de la deuda soberana de España aunque el Gobierno pida un rescate completo para aliviar la presión de los especuladores.

En nada tranquiliza a los inversores la inminente reanudación de la agenda de contactos por parte de los líderes europeos. El primer ministro griego, Antonis Samaras, se entrevistó con el presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, y la canciller alemana Angela Merkel recibe hoy al presidente francés François Hollande en Berlín, donde mantendrá un encuentro mañana con el dirigente del país heleno.

El Ibex 35 de los principales valores de la bolsa de Madrid perdió ayer el 2,70% y cerró en 7.340,70 unidades. Los niveles de resistencia conquistados en las tres primeras semanas de agosto saltaron con gran facilidad. Aunque la jornada se saldó en negativo para todos, la evolución del parqué español fue, a considerable distancia, el peor comportamiento de las principales bolsas europeas, porque el FTSE-100 de Londres cedió el 1,42%, el CAC 40 de París perdió 1,47%, mientras en Fráncfort el DAX cerraba con un retroceso de 1,01% y el indicador de Milán acusaba una pérdida del 1,1%.

Los valores más castigados se localizaron en los sectores bancario y energético. En el área financiera ha vuelto la inquietud porque los últimos detalles del 'banco malo', que aglutinará los activos tóxicos del inmobiliario, se acabarán de perfilar de acuerdo con los técnicos enviados Bruselas, y los bancos se juegan mucho en el diseño final de este instrumento. El Santander retrocedió el 2,78%, BBVA cedió el 2,79%, CaixaBank se dejó el 1,07% y Bankia perdió el 2,58%, para cerrar a 1,35 euros.

La abierta confrontación de los ministros que defienden dipares criterios en la reforma energética pasó factura a las renovables -Acciona se derrumbó un 6,57% y Abengoa perdió el 6,03%, mientras la industria de aerogeneradores Gamesa se hundió el 4,99%- pero también a las eléctricas tradicionales, porque Iberdrola retrocedió el 3,96%, Gas Natural Fenosa se dejó el 2,19% y Endesa el 1,33%, e incluso a la petrolera Repsol, que sufrió un descenso del 5,25%. Pero el clima negativo se extendió a las compañías más negociadas, y Telefónica perdió el 3,05%.

La prima de riesgo de España se amplió hasta los 481 puntos, porque el interés de las obligaciones a diez años treparon al 6,27% y el de los bonos a dos años reanudó su escalada hasta el 3,49%. Parte de culpa la tuvo la trayectoria fuertemente bajista de los títulos públicos germanos. Alemania sigue siendo capaz de colocar en el mercado hasta 4.082 millones de euros a 24 meses ofreciendo rentabilidad 'cero'.

La opinión de Standard & Poors se conoció tras el cierre del mercado. La perspectiva negativa que la agencia tiene sobre la economía española no se ha modificado, pero la nota BBB+, equivalente a un aprobado alto, no descenderá si el Gobierno de Mariano Rajoy acaba por pedir un rescate total. La firma sugiere, incluso, que la calificación podría mejorar si el fondo de rescate europeo empieza a comprar deuda periférica, el Banco Central Europeo reanuda su programa de adquisición de bonos soberanos en los mercados secundarios y se aprecian notables progresos en el camino hacia la unión bancaria europea.