Gripe y resfriados en verano, así puedes evitarlos

Un estudio demuestra que existe una relación entre los bajos niveles de vitamina D y los resfriados, lo que significa que el papel del sol y alimentos ricos en vitamina D podrían ser beneficiosos para evitar infecciones. Por eso es más frecuente sufrir gripes y resfriados en invierno. Pero cuidado, en verano también puede ocurrir. ¿Gripe en verano? Pues sí, y es más frecuente de lo que imaginamos.

En España, durante el verano, las olas de calor están causando estragos debido a los cambios bruscos de temperatura, como el uso de aires acondicionados en interiores. Estas condiciones están exacerbando los efectos de estas enfermedades y teniendo un impacto significativo en la salud de las personas. Así que apunta estas claves para evitar una gripe o un resfriado en verano.

- Cuidado con el aire acondicionado. Los aparatos de aire acondicionado irritan nuestras mucosas nasales, facilitando la entrada de rinovirus.

- Mantente alerta contra las corrientes de aire. Pueden provocar efectos parecidos a los del aire acondicionado.

- Aprovecha el sol con precaución. La vitamina D es fundamental para la salud de los huesos, los dientes, la absorción del calcio a nivel intestinal y desempeña un papel esencial en el sistema nervioso, muscular e inmunitario.

- Evita los cambios bruscos de temperatura. Es normal que quieras poner el aire acondicionado cuando vuelves a casa, pero trata de pasar del calor al frío de manera progresiva para que tu cuerpo se adapte.

- Hídratate constantemente. En verano sudamos más y es más probable deshidratarnos. Bebe agua con frecuencia y toma alimentos como la sandía, que nos aportan mucha agua.

- La alimentación es clave. Aumenta la ingesta de alimentos ricos en vitamina D, frutas y verduras.

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