España establece un cargador universal para los aparatos electrónicos
Todos los dispositivos tendrán que funcionar con cable tipo USB-C
Salvador Vallejo
Martes, 2 de mayo 2023, 16:16
El próximo 2025 -concretamente el 28 de diciembre de 2024- habrá terminado la problemática con los cargadores, ya que España, tras la regulación del Parlamento Europeo del pasado octubre, ha impuesto el cargador universal para todos los aparatos electrónicos. El modelo, evidentemente, es el tipo USB-C, y toda clase de dispositivos deberán compartir dicho sistema de carga por cable: teléfonos móviles, tabletas, cámaras digitales, auriculares, videoconsolas portátiles, altavoces, lectores de libros electrónicos, teclados o ratones. Solo los ordenadores portátiles, por cuestiones técnicas, podrán tomar un año más para realizar la transición.
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El Ministerio de Asuntos Económicos encuentra razones económicas muy palpables que avalan la decisión en España: ahorro estimado de 26 millones de euros anuales para los consumidores, 48 millones de euros para minoristas y distribuidores, y 2 millones de euros para fabricantes. También está el beneficio en materia ambiental, ya que se reducirán toneladas de uso de material y, por consiguiente, de residuos electrónicos.
Más de una década de debate
En 2009 la Comisión Europea comenzó a gestionar la unificación de los cargadores a través del microUSB. Esto finalizó en 2014 (año de aparición del tipo USB-C), cuando el Parlamento Europeo exigió a los países de la Unión Europea que adoptaran un cargador único para los aparatos electrónicos. No obstante, la acción comunitaria no se dio, y en 2021, ante la casi nula respuesta, Bruselas presentó una propuesta legislativa para atajar la cuestión y cumplir con el estándar. Finalmente, el pasado 2022 el Parlamento Europeo aprobó la adopción de un cargador único.
Ventajas Tipo USB-C
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La más sencilla y práctica: el tipo C se puso a la par del «Lightning» de Apple permitiendo que el puerto pudiera introducirse en ambos sentidos.
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Otra evolución clave: soporte de corrientes de carga más altas. Especialmente estamos viendo cómo los fabricantes le están sacando provecho durante los últimos años, con la introducción de cargas rápidas de hasta 150W.
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Transmisión de datos a mayor velocidad.
Esta conexión entró con fuerza especialmente en el mercado de los teléfonos móviles. La totalidad de los smartphones, con la única excepción de los Iphone, fueron introduciendo paulatinamente dicha conexión, comenzando por los dispositivos más punteros hasta su democratización a todas las gamas. Es muy práctico que todos los fabricantes de móviles compartan entrada de carga, por lo que llevar esto al resto de aparatos tecnológicos supondrá, a buen seguro, un avance para los usuarios y fabricantes.
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