El SES facilitará el nuevo tratamiento inyectable del VIH a pacientes que lo pidan

Consiste en el pinchazo de dos medicamentos cada dos meses y podrán empezar con este nuevo fármaco aquellos que se lo soliciten a su médico. «Si un paciente manifiesta a su facultativo su preferencia por el tratamiento inyectable, el facultativo lo solicitará y el SES se lo facilitará», aseguran desde la Consejería de Sanidad.

El Ministerio de Sanidad financia este nuevo fármaco desde hace poco tiempo y, por el momento, según indican desde la Subdirección de Gestión Farmacéutica del SES, ningún paciente en la región extremeña lo ha solicitado.

El nuevo tratamiento, el primero no oral de los que existen para combatir esta enfermedad, se basa en una inyección intramuscular que debe ser puesta cada dos meses.

El tratamiento combina dos medicamentos, el cabotegravir y la rilpivirina. Cada uno de ellos se administra en un pinchazo en diferente lugar. El fármaco basa su mecanismo de acción en un sistema de nanopartículas o nanocristales que permite que la medicación se libere de forma gradual en el organismo durante dos meses, plazo en el que debe volver a administrarse.

La población a la que va dirigido el fármaco son los pacientes de VIH que ya tienen el virus suprimido, es decir, que ya lo han controlado, pero que pueden encontrar ventajas en pincharse cada dos meses frente a tomar píldoras cada día.

Eso sí, se debe ser muy exhaustivo con el día del pinchazo. Ante eso, hay especialistas que opinan que para algunos pacientes puede ser más sencillo seguir tomarse las pastillas diariamente porque ya están acostumbrados a ellas. «Hay que tener en cuenta que probablemente para el paciente puede ser más fácil mantener la adherencia al tratamiento con las pastillas, siguiendo el hábito de una diaria, que recordar la fecha de la inyección», apuntan desde el SES.

Por otro lado, «las pastillas pueden tener un impacto en la toxicidad a largo plazo, existen problemas de adherencia al tratamiento y en caso de no tomarlas, producirse un efecto rebote, y hay retos emocionales en los pacientes, para los que tomarlas cada día les recuerda la enfermedad», según señala la especialista en Medicina Interna de la Unidad de VIH del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, Eugenia Negredo.

Tampoco es un tratamiento del que se puedan beneficiar todos los pacientes de VIH, aunque muchos de ellos sí. Se recomienda en pacientes que están bien controlados y que, por algún motivo, les aporta ventajas frente al tratamiento oral diario. Además, para tomarlo debe esperarse a tener una carga vírica indetectable, por lo que no es apropiado en pacientes recién contagiados. Actualmente, hasta el 90% de quienes tienen VIH tienen carga vírica suprimida.

En cuanto a la fiabilidad de este nuevo tratamiento, ya existe un manejo de la seguridad y eficacia muy prolongado y los principales efectos secundarios son el dolor de los pinchazos.

Más de 650 pacientes de 44 centros hospitalarios de toda España han participado en los últimos ocho años en las diferentes fases del proceso de desarrollo del medicamento, que ha contado con siete ensayos clínicos. Además, está recomendado por las guías clínicas españolas y norteamericanas y tiene la aprobación de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), que cree que este antirretroviral de acción prolongada que reduce la frecuencia de dosificación «presenta una mejora significativa al aumentar la satisfacción general con el tratamiento y reducir la carga asociada con la toma diaria de comprimidos».

El medicamento ha sido desarrollado en colaboración por dos empresas: ViiV Healthcare y Janssen. España será el octavo país europeo en utilizar esta innovadora terapia de acción prolongada.

En Extremadura hay 1.390 personas con VIH y de ellas 667 han desarrollado Sida, la fase más grave de la infección por VIH, según los últimos datos de la Red de Vigilancia Epidemiológica de Extremadura. De todo ellos, el 78,1% son hombres.

En los últimos diez años, la media de nuevas infecciones anuales ha sido de 32 personas. De ellas cinco llegan a Sida.

Además, en un 11% de todos los que se diagnostican ya han desarrollado la enfermedad, por lo que es necesario seguir combatiéndola.

De hecho, el Consejo de Gobierno de este pasado miércoles ha aprobado el Plan de Acción sobre el VIH/Sida y Otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en Extremadura 2023-2030.

Con él se pretende proporcionar una respuesta conjunta y global a la infección para reducir la incidencia y prevalencia, realizar un diagnóstico precoz y eliminar el estigma y la discriminación que siguen padeciendo las personas seropositivas.