Muere Aniceto Mesías, uno de los padres del cava extremeño
Fue uno de los tres bodegueros que empezaron a elaborar espumoso en Almendralejo y logró que fuera reconocido por la denominación de origen
Ha muerto Aniceto Mesías, considerado uno de los padres del cava extremeño. Fundó en los años 70 las Bodegas Vía de la Plata, de las que estuvo al frente hasta su jubilación en el año 2013. Nacido en 1946 en el seno de una familia muy vinculada al vino, estudió ingeniería técnica química y enología, colaboró con la denominación de origen Ribera del Guadiana y fue profesor en el centro universitario Santa Ana de Almendralejo.
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Está considerado uno de los tres padres del cava extremeño, junto a Marcelino Díaz y Pablo Juárez, al ser estos los primeros bodegueros en Almendralejo que comenzaron a elaborar este producto en los años 80. Con el paso del tiempo, lograron que el espumoso extremeño fuera reconocido dentro de la DO Cava. Precisamente, Díaz recibirá el próximo 7 de septiembre la Medalla de Extremadura en el Teatro Romano de Mérida.
El fallecimiento de Mesías fue comunicado este viernes por la Comunidad de Labradores y Ganaderos de Almendralejo, quien ha expresado su más sincero pésame a la familia y amigos y traslada sus condolencias a todos los que compartieron con él una vida dedicada al mundo del vino y la enología.
«Aniceto fue uno de los tres valientes impulsores que, en los años 80, apostaron por llevar la producción de cava más allá de las fronteras tradicionales, enfrentándose a grandes dificultades y a un entorno prácticamente restringido a Cataluña», recuerda la Comunidad.
«Su determinación y esfuerzo le llevaron a iniciar una larga y ardua lucha judicial que culminó en una sentencia del Tribunal Supremo a su favor, abriendo así el camino para que todo el término municipal de Almendralejo pudiera formar parte de la Denominación de Origen Cava», añade en un comunicado.
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«Su compromiso con la calidad y la defensa de la denominación fue firme, incluso en momentos de controversia, como en 2004, cuando criticó el boicot a los cavas catalanes, defendiendo que 'la calidad no se puede vender'».
Por eso, desde la Comunidad de Labradores se quiere reconocer y valorar «su entrega, su visión y su lucha incansable por un sueño que hoy forma parte de nuestra historia». «Su legado perdurará en cada burbuja que él ayudó a hacer realidad y en el corazón de quienes valoramos su ejemplo y su esfuerzo».
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