Felicidades

Para mí, es todo un placer poder escribir estas breves líneas, que se haya contado conmigo, en representación de la capital de Extremadura, para celebrar este aclamado aniversario. La historia del Diario HOY y su crecimiento así como sus virtudes y errores van en paralelo al desarrollo económico, social y cultural de una ciudad tan vibrante y especial como es Mérida.

Un periódico es el reflejo de la sociedad, una sociedad como la emeritense, que avanza y se adapta, que se informa y debate, y que evoluciona conjuntamente al ritmo de su ciudad. Más aún cuando esta es Patrimonio de la Humanidad y la segunda localidad de todas y todos los extremeños. Siempre que puedo me gusta recalcar esta última idea, pues es Mérida la capital extremeña, lugar de referencia y reencuentro de nuestra sociedad.

Una sociedad que no se siente tan sola gracias al gran equipo humano que hay detrás de este periódico, a los y las profesionales del periodismo, que diariamente ponen palabras a lo que está ocurriendo a nuestro alrededor.

Además, son nuestro enlace con el mundo, siempre que lo sean a través de criterios de objetividad, rigor y certeza, como fundamentales principios del periodismo. Tienen la capacidad de convertirse en el altavoz de nuestros vecinos y vecinas, de denunciar las injusticias y narrar los triunfos. Mi ciudad, Mérida, tiene la suerte de poder albergar entre sus calles a grandes periodistas, que han marcado y están marcando un antes y un después. Y que nos enseñan la necesidad del periodismo como servicio público, un derecho esencial en nuestras vidas. Haciendo especial hincapié en todas y todos los emeritenses que han hecho crónicas desde nuestra preciosa calle San Francisco y antes desde otros lugares de la ciudad.

Estoy seguro que al Diario Hoy le quedan muchos años, tantos como los que lleva contando historias, las más pequeñas y las que hacen cambiar la portada a última hora de la noche. Mérida, en positivo, será protagonista de muchas de ellas. Las y los emeritenses se lo merecen.