Yolanda González, de las Escolapias a Silicon Valley

De las Escolapias de Mérida a Silicon Valley, California, Estados Unidos. De manera muy resumida éste es el itinerario de Yolanda González Fernández (Badajoz, 1989) gracias a su talento, su esfuerzo y a las ayudas económicas que ha ido obteniendo, unas becas que han sido decisivas para que avanzara en sus investigaciones.

Esta joven de 27 años se licenció en Sevilla en Farmacia y es máster en diseño Galénico y Biofarmacia por la Universidad de Navarra. Junto a su compañera Edurne Imbuluzqueta ha ganado la fase navarra del concurso Yuzz para jóvenes emprendedores del Banco Santander y está a la espera de ver qué pasa en la final nacional, en la que competirán un centenar de trabajos de investigación.

Su proyecto de nombre Nanocore Biotech propone una mejora en la terapia para tratar el cáncer de huesos en niños. Se centra en incrementar la efectividad y reducir las secuelas y le ha servido para saber cómo dar el paso de la investigación al mundo empresarial. «Yo antes que nada soy científica, puede que también me convierta en emprendedora en un futuro, pero aún no lo sé», señala para adelantar que es muy probable que siga formándose siempre que exista la oportunidad.

Su grupo de trabajo actual lo componen cinco mujeres y dos hombres. «En el mundo de la investigación hay mayoría de mujeres, pero es curioso que a nivel de supervisores y grandes jefes todos son hombres, aunque creo que esto se va a ir invirtiendo. De hecho, mi tesis ahora mismo la dirigen dos mujeres», explica.

Desde finales de abril esta científica extremeña está en de la Universidad de Sheffield (Inglaterra) realizando una estancia pre-doctoral en el Departamento de Metabolismo y Oncología Ósea que se prolongará hasta finales de julio. Su siguiente destino, gracias a la beca del Banco Santander, será de quince días en octubre en Silicon Valley, considerada la meca de la innovación y donde espera seguir aprendiendo.

«Hacen falta más becas»

Amante de los viajes, los idiomas y el deporte (un accidente reciente esquiando la tiene ahora lesionada), Yolanda se ha criado en Mérida. Allí fue al colegio de Las Escolapias antes de marchar a Sevilla a estudiar Farmacia. Su padre, dentista, es de Ribera del Fresno y su madre, profesora, de Almendralejo. Son cuatro hermanos. Ella es melliza de Pilar, médico, y le siguen en edad María, que estudió Derecho y Económicas, y Pedro, ahora en Bachillerato.

Según cuenta, para seguir formándose ella tuvo que usar una beca Erasmus, que es cofinanciada por las comunidades autónomas y en su caso le ayudó Andalucía. Después consiguió la beca del Banco Santander y el doctorado lo está realizando gracias a otra beca de la Asociación Española contra el Cáncer. «Hay que invertir en formación para que salgan los jóvenes al extranjero si no queremos que nuestra región siga teniendo ese carácter rural».

Pepa Pérez fue profesora de Yolanda cuando ésta cursaba cuarto de Primaria, con nueve y diez años. La recuerda perfectamente y no se queda corta en adjetivos positivos hacia su persona: «Trabajadora, cumplidora, sociable, dicharachera, participativa y nunca arrogante pese a las calificaciones altísimas que obtenía». Esta maestra, conocida en el centro como Pepita, habla de ella y su hermana melliza como dos estudiantes «con chispa, muy divertidas y muy aceptadas, con las que todo el mundo quiere jugar». Y añade que cada vez que Yolanda regresa a Mérida convoca al grupo de amigas de aquella época de Primaria, por lo que se ve asiduamente con sus antiguas compañeras.

En opinión de esta maestra, que tanto ella como sus tres hermanos sean brillantes en sus estudios lo deben a un ambiente familiar muy favorable. «La madre, que es profesora de Matemáticas en un instituto de Mérida, ha jugado siempre un papel fundamental en esa casa y siempre los ha motivado para que llegaran lejos. Yo diría que ahí está la clave, en la madre».