Los trabajos para recuperar la zona quemada en Gata empezarán el lunes

La recuperación de las infraestructuras rurales y el auxilio a las explotaciones agrícolas que se han visto afectadas por el incendio forestal de la comarca cacereña de Sierra de Gata se han convertido en prioridad para la Junta de Extremadura, que anunció ayer que los primeros trabajos para recuperar la zona quemada empezarán el lunes, informa Efe. A última hora de la tarde de ayer, el incendio de Sierra de Gata fue dado por controlado una semana después de que se declarase, y el nivel de peligrosidad se rebajó al 0, según decidió el mando único del Infoex.

Así se desprende de los dos encuentros que distintos responsables del Ejecutivo extremeño mantuvieron ayer con los alcaldes de las poblaciones perjudicadas y con representantes de las asociaciones agrarias para evaluar los daños que las llamas han causado en los caminos rurales y las explotaciones agrícolas de la zona. El objetivo de ambas sesiones de trabajo, que se celebraron en Perales del Puerto y Moraleja, fue determinar las actuaciones de emergencia que se van a realizar.

El director general de Desarrollo Rural, Manuel Mejías Tapia, anunció que los trabajos de recuperación de las infraestructuras rurales dañadas comenzarán la próxima semana, al objeto de garantizar el acceso de los vecinos a sus fincas y facilitar los trabajos de limpieza de los montes. En este sentido, Mejías Tapia explicó que se van a llevar a cabo «de forma inmediata» cuatro actuaciones a partir de la próxima semana. La primera de ellas consiste en la construcción de diques para evitar la erosión del terreno; la segunda tiene que ver con el arreglo de caminos para garantizar el acceso a los vecinos a sus parcelas, y la tercera, con la limpieza de cunetas. Finalmente, se repondrá la señalización vertical y horizontal en las carreteras de la zona. Mejías Tapias indicó que la red de caminos de los tres municipios más afectados por el incendio (Perales del Puerto, Hoyos y Acebo) abarca unos 250 kilómetros, y aseguró que la valoración de los daños se va a realizar dentro del perímetro del terreno dañado.

Las explotaciones familiares

Por su parte, Yolanda García Seco, la directora general de Política Agraria Comunitaria de la Consejería de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, afirmó ayer que el Gobierno regional «auxiliará y ayudará» a las pequeñas explotaciones de carácter familiar que se han visto afectados por el incendio.

La directora general apuntó que ya se han tomado las primeras medidas, como el reparto de alimentos para las explotaciones ganaderas afectadas. El siguiente paso es elaborar un plan de evaluación de daños. En materia de agricultura se han contabilizado alrededor de 650 hectáreas de olivar quemado y 1.500 de pasto con arbolados, el área que presenta mayores dificultades dado que lo relativo a pasto arbustivo se regenera con más dificultad. «Vamos a trabajar con toda esta información para elaborar un plan de actuación», reiteró García Seco, quien recordó que aunque los daños asegurables no son indemnizables, sí existen otros a los que se dará respuesta por parte de las administraciones para reparar y reponer algunas infraestructuras fundamentales para las explotaciones agrarias. Dentro de la reuniones que responsables de la Junta han mantenido en los últimos días con alcaldes de la zona, se han esbozado las líneas generales de la actuación que el Gobierno regional desarrollará a corto y medio plazo. Una de las premisas será la paulatina sustitución de los pinares por masas de robles, castaños, alcornoques o encinas, especies que no arden con tanta facilidad como el pino que abunda en la sierra afectada y también en otros parajes de la comunidad.