El Figón de Eustaquio, tradición más allá de su nombre

Este restaurante no es apto para 'posturitas', vaya eso de antemano... Al Figón de Eustaquio se viene a comer mucho, bien y lo de siempre. Lleva 74 años abierto, sin moverse y modernizándose lo justo. Pero su éxito se lo garantizan, de sobra, los 146 platos que componen su carta. Una extensa propuesta en la que encuentras desde sopa de tomate a boletus, pescados, carnes o migas. ¿El postre? También cumple con la tradición, sobre todo su leche frita.

Ir al Figón de Eustaquio es ir en busca de los platos de siempre, los de la abuela, los de mamá. Los típicos extermeños, los de siempre. La tradición es su máxima y no solo en su nombre. Parada obligatoria para comer como en casa.