Sebas Gil dice adiós al Don Benito tras nueve años

«Con el tiempo construí aquí mi casa. Sencillamente porque hicisteis de esta mi casa. Pero como todo en la vida, tiene un principio y un final», comenzaba el portero de La Zarza en un texto compartido por redes sociales en el que se acordaba de los entrenadores que ha tenido en este tiempo, pero también de otros miembros del cuerpo técnico como Andrés Gallego, utillero. «Gracias a él nunca nos faltó de nada», dijo sobre él, con el que era habitual un abrazo previo antes de cada partido. También especiales fueron las palabras para Mario Sosa, primero compañero y después preparador de porteros, «eternamente agradecido por aguantar mis malos y buenos momentos».

Nueve años después de su llegada desde el Mérida, se lleva tres temporadas en Tercera y seis entre Segunda B y Segunda RFEF, contabilizando así dos ascensos. «Ha habido momentos buenos y otros no tan buenos», proseguía, «he tratado de dar lo máximo por este escudo y sus colores».

Ahora, cree que es el momento de dar un paso al lado, «lo hago con el mayor orgullo, por lo que tengo a mi alrededor y por lo que supone haber podido representar este club casi centenario en un pedacito de su historia», expresaba antes de concluir que «desde donde me toque, seguiré siendo uno más de vosotros».