Weiner, escultor del lenguaje

Esculturas lingüísticas. En esta intervención en el Panteón Nacional de Lisboa titulada 'Alrededor del mundo/A volta ao mundo' cobra forma la Declaración de Intenciones que Weiner emitió en 1969: «El artista puede construir la obra. La obra puede ser fabricada. La obra no necesita ser construida». De tal modo que asistimos a un despliegue de textos, frases crípticas, tipografías... en los que Weiner explora en términos artísticos las capacidades del lenguaje como medio escultórico. No faltan referencias a las condiciones históricas y de trabajo en las que se ubican, en el caso que nos ocupa con alusiones a la navegación, la circularidad del Panteón que reproduce la imagen del ecuador, o cuestiona convenciones sobre lo que está arriba o abajo en la representación terráquea.

En 'A volta ao mundo' le corresponde al público decidir qué camino escoger, si a la derecha o al izquierda, arriba o abajo... Simbología hombres/mujeres. Para André de Quiroga, uno de los comisarios, «Esta intervención de Weiner en un espacio donde 'simbólicamente' descansan nombres ilustres, coronados con laureles inmortales» ofrece un nueva forma de consagración -de naturaleza cívica- y la posibilidad de ampliar y diversificar el público para su obra. Se trata de una estrategia que va más allá del carácter oficial que se suele atribuir a los monumentos y a las formas de exhibición histórica o patrimonio que contienen. Y al hacerlo, el uso escultórico que Weiner hace de la tipografía y el texto como medio artístico temporalmente corrige el desequilibrio entre hombres y mujeres de letras y los artistas conmemorados en el Panteón de Lisboa. Ya saben, es el público quien finaliza la obra.