Tesoros de la Humanidad por Extremadura

Muchas de las calles, plazas y monumentos que componen la región guardan entre ellos leyendas y tesoros escondidos de gran valor histórico y artístico. Extremadura atesora grandes enclaves de gran valor patrimonial, un valor reconocido por la Unesco quien los ha declarado bienes Patrimonio de la Humanidad.

Un legado que nuestros antepasados dejaron y que se conserva a día de hoy para que podamos seguir disfrutando de algunos de los elementos arquitectónicos y artísticos más espectaculares del mundo. Tesoros que permiten hacer un recorrido histórico por los rincones más valiosos de Extremadura.

Entre la incalculable belleza y riqueza monumental extremeña se encuentra el denominado 'Triángulo de Patrimonio de la Humanidad' compuesto por las localidades de Cáceres, Guadalupe y Mérida, tres ciudades que albergan en su interior los tesoros más preciados de la región.

Ciudad vieja de Cáceres

Comenzamos con la capital cacereña, en la que la ciudad vieja de Cáceres, fue la primera en ser declarada Patrimonio Mundial por la Unesco en 1986, por su centro histórico compuesto de una gran unidad perfectamente conservada cuyos orígenes se remontan a la época romana, visigoda, islámica, gótica y renacentista, culturas que se aúnan para componer un conjunto monumental único.

Este legendario conjunto monumental está comprendido en un recinto amurallado de aproximadamente 1200 metros de origen almohade, en la que se conservan muchas de sus torres albarranas como la del Horno, la de Santa Ana o la torre del Bujaco, la más conocida y visitada en la ciudad ya que permite contemplar buena parte de la ciudad monumental desde lo alto del almenar. Además conserva torres cristianas como la de los púlpitos y accesos como el arco de la Estrella o del Cristo.

El interior del recinto amurallado tiene un trazado irregular típico de época medieval, que da como resultado un conjunto de pequeñas calles y plazuelas, entre las que destacan por su belleza la calle ancha o la plaza de Santa María. Además, en este espacio se levantan singulares monumentos como el Palacio de Golfines de Abajo, el palacio de las Veletas, el palacio de Carvajal, la Casa Mudéjar o la Torre de los Plata.

Además de este espectacular conjunto monumental, la Semana Santa de Cáceres fue declarada en el año 2011 Fiesta de Interés Turístico Nacional, convirtiéndose en la primera y única ciudad extremeña que ostenta este título internacional. En este sentido, la ciudad posee un centro de divulgación de la Semana Santa muy visitado por los turistas. En este sentido, la Unión de Cofradías de Cáceres ha propuesto que la Semana Santa cacereña sea declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Conjunto monumental de Mérida

El segundo vértice del triángulo le corresponde a la capital extremeña, siendo el conjunto monumental de Mérida uno de los más importantes de España, galardonado con esta distinción por la Unesco en 1993.

En este sentido, la ciudad posee una abundante colección de monumentos y obras públicas, situadas en una extensión que ocupa 36.87 hectáreas, compuesto por 29 elementos, localizados , en su mayoría en el interior de la antigua colonia romana de Augusta Emérita, sin embargo algunos de los elementos se encuentran en extramuros como las presas, el acueducto de los Milagros que transportaba el agua del pantano Proserpina, y el acueducto Rabo de buey-San Lázaro.

Entre los restos de la ciudad romana cabe destacar entre los elementos declarados, el Teatro Romano, siendo este el elemento más representativo de la capital y el que sigue siendo escenario en la actualidad de numerosos espectáculos a pesar de sus más de 2000 años de antigüedad. El Anfiteatro, donde se daban espectáculos de lucha entre gladiadores y el Circo Romano donde se celebraban las famosas carreras de cuádrigas y bigas.

Otros elementos que componen este conjunto y que son muy significativos de la ciudad son el Arco de Trajano que servía de entrada al foro municipal y está situado en la que era una de las principales vías de la ciudad, o el Templo de Diana, un edificio de carácter religiosos perteneciente al foro municipal de la ciudad.

Completan la variedad de monumentos los museos que se encargan de preservar y mantener el legado que las diferentes culturas han dejado en Mérida. Desde el conocido Museo Nacional de Arte Romano, obra de Rafael Moneo, hasta el museo de geología el visitante podrá disfrutar de todas las actividades que se organizan entorno a estas instituciones.

Por otro lado, la Asociación de amigos del Festival de Mérida y el alcalde de la capital extremeña Antonio Rodríguez Osuna, han propuesto que el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida sea declarado patrimonio inmaterial de la Humanidad por ser el más antiguo a nivel nacional y ser uno de de los más importantes de Europa

Monasterio de Guadalupe

Se cierra el triángulo con la localidad cacereña de Guadalupe, en la que su monasterio fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1993. El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe es una obra de interés excepcional como ejemplo de la arquitectura religiosa. Se trata de un edificio religioso único, mezcla de estilos gótico, mudéjar, renacentista, barroco y neoclásico, cuya construcción se ha desarrollado a lo largo de los siglos XIII al XVIII.

Es considerado además, "Museo de los Museos", ya que guarda en sus muros un rico patrimonio artístico e histórico de reconocida admiración nacional e internacional. En la actualidad diferentes estancias del Real Monasterio se establecen como Museos: el museo de Bordados, que se levanta en el antiguo refectorio y contiene una maravillosa colección de ornamentos y ricas telas; el de Libros miniados, instalado en una nave de la galería norte del claustro mudéjar con su incomparable colección de 107 ejemplares confeccionados en el Taller del Real Monasterio durante los siglos XIV y XIX; y el de Esculturas y Pinturas, una espaciosa sala del siglo XV inaugurada en el 1988.

Tesoros por reconocer

Además de los nombrados anteriormente, existen en la región otros muchos tesoros monumentales, paisajísticos y culturales que intentan abrirse hueco en la lista del Patrimonio Mundial.

En la provincia de Badajoz, se concentran las murallas abaluartadas de la capital pacense. En el año 2012 Badajoz y Elvas plantearon presentar una candidatura conjunta para que sus fortificaciones abaluartadas fueran Patrimonio Mundial, sin embargo, Elvas presentó una petición individual, y en solitario, ganó el título. Actualmente, Badajoz pretende presentar su candidatura ante la Unesco y ser una extensión de la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la fortificación abaluartada de Elvas. Sin embargo, aunque Badajoz cuenta con una importante fortaleza abaluartada, en algunos tramos de la muralla o de sus baluartes están deteriorados, por lo que el alcalde de Badajoz Francisco Javier Fragoso sostiene que cuando estén en "un estado de recuperación y reinterpretación" que permita "estar al nivel suficiente", se presentará el proyecto para su posterior evaluación por la Unesco.

Asimismo, en la provincia de Cáceres, lugares como Plasencia, la llamada capital del norte de Extremadura, también conocida como la Perla del Valle del Jerte ha sido propuesta para ser declarada Patrimonio de la Humanidad en dos ocasiones conjuntamente con la ciudad monumental de Trujillo, cuna de descubridores, tierra de grandes batallas y apasionantes historias, y el Parque Nacional de Monfragüe, una extensa y conservada mancha de monte mediterráneo, rodeada de sierras pobladas con encinares y salpicada de roquedos y arroyos. Por su parte, ríos y embalses riegan las áreas ribereñas del Parque Nacional de Monfragüe. Todo ello, da lugar una rica y variada vida vegetal y animal. Este bello paraje fue declarado Parque Natural en 1979 para proteger el entorno de las plantaciones de eucalipto. Desde 2003 es calificado como Reserva de la Biosfera por la Unesco, como reconocimiento de la relación de siglos entre el hombre y el medio ambiente. Finalmente y debido a todo el trabajo de consolidación y protección, en 2007 fue declarado oficialmente Parque Nacional. Estos tres tesoros reconocidos a nivel regional y nacional se unieron para optar a ser declarados paisaje natural Patrimonio de la Humanidad, pero la Unesco desestimó la candidatura.

Otro de los tesoros naturales que posee la región es la dehesa extremeña , un gran ecosistema bien conservado de casi un millón de hectáreas, compuesta de grandes extensiones pobladas de encinas, olivos y alcornoques, sobre una alfombra de hiervas silvestres, jara y romero. Es el hábitat del cerdo ibérico, que permanece en montanera, pastando en libertad bellotas y hierbas silvestres, desde octubre hasta el comienzo de la primavera. Cruzando estas dehesas es fácil avistar especies silvestres como cigüeñas, buitres, águilas, ciervos y jabalíes. En este sentido, Extremadura y Portugal presentarán una candidatura conjunta que pretende el reconocimiento de la dehesa con el título de Patrimonio de la Humanidad.

Además, existe una segunda candidatura conjunta titulada 'Los paisajes simbólicos del Occidente Peninsular: el arte rupestre esquemático como unidad cultural', y en la que participan Extremadura, Galicia, Castilla y León, Castilla La Mancha, Andalucía y Portugal.

En este sentido, la cueva de Maltravieso, en la zona sur de Cáceres, constituye un microclima cavernario en el que aparece un conjunto de representaciones rupestres, entre las que cabe destacar el importante conjunto de manos, así como representaciones zoomórficas e ideomórficas. Además, en la provincia de Badajoz, la Sierra de San Serván es rica en estas pinturas que al parecer pueden situarse entre los años 1500 y 500 a. C., constituyendo uno de los conjuntos más valiosos de la región.

Asimismo, se presenta como candidata la Vía de la plata que originariamente iba desde Asturica Augusta (Astorga, León) hasta Emérita Augusta (Mérida) y fue una de las calzadas principales que vertebraron la comunicación en Hispania durante el Imperio romano.

La parte extremeña de la Vía de la Plata es una preciosa ruta que recorre algunos de los lugares más significativos de Extremadura.

La ruta comienza en Monesterio, donde se puede visitar la Iglesia de Santiago Apóstol, y continua por localidades como Zafra, quien posee uno de los conjuntos históricos más bellos de la región, Casar de Cáceres donde poder degustar una deliciosa Torta del Casar o Cáparra con su arco cuadrifronte de origen romano cuyas características lo convierten en monumento único en España. La ruta extremeña termina en en la localidad cacereña de Baños de Montemayor, localidad famosa por sus aguas termales. El proceso de solicitud de este nombramiento se llevará a cabo de manera conjunta entre las comunidades autónomas de Extremadura, Andalucía, Castilla y León y Asturias. Sin embargo, para que la Vía de la Plata sea reconocida como Patrimonio de la Humanidad, tiene que haber sido nombrada en su totalidad Bien de Interés cultural (BIC), sin embargo, solo Extremadura y Castilla y León, tienen reconocida esta protección. En el caso de Asturias, se ha comenzado a realizar el expediente, por lo que depende de la Junta andaluza el poder iniciar o no el proceso de solicitud.

Como última propuesta se presenta el puente romano de Alcántara, una obra de ingeniería única en el mundo por sus dimensiones, su conservación y su uso continuado desde hace aproximadamente 2000 años. Por ello, son muchas las asociaciones que solicitan que sea declarado Patrimonio de la Humanidad, una petición apoyada por la Junta de Extremadura quien ha impulsado la candidatura para que el puente sea galardonado con esta distinción. Fue declarado 'Mejor rincón' 2014 al ser considerado uno de los puentes romanos mejor construido. Un título que intentó obtener en anteriores ediciones la Judería de Hervás, un barrio de este municipio de calles empinadas que culebrean entre casas con grandes voladizos y balconadas, entre tabernas y establecimientos de artesanos. Por ello, en 1969 fue elegido conjunto histórico-artístico. En la edición de este año, opta a ser 'Mejor rincón 2015' es el paraje natural Los Barruecos, declarado Monumento Natural en 1996 por la Junta de Extremadura. Situado en plena plenillanura de Cáceres, se caracteriza por un relieve aplanado, sin casi árboles, y dominado por grandes bolos graníticos asentados a la orilla de las charcas. Ubicado en estos terrenos se encuentra el museo Vostell-Malpartida, que integra en el bello paisaje las obras de este artista alemán. También destacan los restos prehistóricos y el asentamiento romano en la zona.