Womad controlará el acceso a los conciertos para prohibir el botellón por segundo año en Cáceres

Tras muchas tentativas y anuncios la edición del año pasado se convirtió en la primera de la historia en la que se decidió romper con la práctica del botellón en la Plaza Mayor, que generaba un inmenso mar de plástico y algunos problemas de convivencia durante esta celebración multicultural.

Los controles se llevarán a cabo en los puntos habituales de acceso a la Plaza (Pintores, Gran Via y General Ezponda) para evitar que puedan introducirse botellas o recipientes. Allí se revisan bolsas y mochilas para evitar esta práctica.

Esta medida se ha acordado en la junta de seguridad que celebraron ayer lunes las fuerzas y cuerpos de seguridad y las organizaciones de protección civil junto a las instituciones que articulan esta cita que llega a aglutinar a unas 100.000 personas entre todos los espacios y durante los cuatro días de celebración.

Además del entorno monumental el Paseo de Cánovas acoge también uno de los puntos en donde se concentra más público, en el mercado de ropa y artesanía.

Muriel anunció también que el control de aforo se llevará a cabo bajo los criterios de la dirección de seguridad de Womad. El Plan de Autoprotección y Evacuación del festival contrata una empresa que se ocupa de controlar el aforo, mientras que la Policía Local, a través de Protección Civil de Extremadura, también contribuye a estas tareas.

La medición y gestión de los aforos se lleva a cabo a través de sistemas aéreos en la azotea de la Plaza Mayor. Serán drones de la Policía Nacional los que se encargarán de esta vigilancia aérea.

En otras ocasiones en los momentos en los que el aforo está en riesgo de superarse se ha cerrado el acceso a la Plaza Mayor.

El dispositivo especial de seguridad arrancará el martes 6 de mayo y se extenderá hasta el domingo 11. Contará, en total, con 400 servicios a lo largo de todas esas jornadas en todos los horarios que afectan al desarrollo de toda la actividad cultural.

Se cuenta con efectivos de Policía Local, Nacional (90 efectivos), Guardia Civil (80) y los servicios de emergencia que brinda DYA y la unidad de protección civil de la ciudad de Cáceres, que aporta 20 voluntarios. Se establecerá también el punto violeta, que trata de sensibilizar y proporcionar apoyo a mujeres que sufran violencia machista durante la celebración de esta cita musical.

En paralelo, se avanza en las reuniones con los hosteleros de la Plaza Mayor para acordar las medidas de seguridad que se impondrán durante la celebración del próximo Womad.

La idea es retirar todas las terrazas y permitir barras en la fachadas de los locales, «siempre y cuando permitan el acceso para la entrada al baño». Muriel señaló que los hosteleros deben dejar a los clientes entrar a sus instalaciones para el uso de los lavabos púbicos. Sobre los precios, el edil ha indicado que el año pasado se produjo «un equilibrio» entre la oferta y la demanda «razonable».

Aunque oficialmente los hosteleros no llevaron a cabo acuerdos específicos, los precios eran bastante similares en unos locales y en otros y podían calificarse de «populares».