Un teléfono de prepago llevó a la Policía Nacional hasta los detenidos por el robo de Atrio

Según fuentes cercanas a la investigación del robo, Priscila cometió un error de novata en el 'oficio' de ladrona, cuando se registró en el Hotel Atrio para dormir una noche. El 26 de octubre de 2021, en la recepción del hotel de cinco estrellas se inscribió con el nombre de Mirka Golubic, y presentó un documento de identidad falso de Suiza. El error que cometió la mexicana de 29 años, que con 16 logró la corona de 'Señorita Canaco', y que con 22 participó en Miss Earth del estado de México, fue que dio su verdadero número de teléfono.

Priscila cenó ese 26 de octubre en el Hotel y fue ahí cuando apareció su pareja, el supuesto cerebro del robo, el rumano y neerlandés Constantín Gabriel Dumitru, de 47 años. Tras cenar en el restaurante los dos visitaron la bodega invitados por el personal del hotel, una práctica totalmente habitual con los clientes.

Los dos subieron a la habitación pagada por la miss y, según la Policía Nacional, pusieron en práctica su plan cuando la cocina ya estaba cerrada. Ella llamó al servicio de habitaciones diciendo que tenía hambre, y la persona que estaba en recepción se ofreció a llevarle una ensalada, se la subió y ella también le pidió fruta. Mientras tanto Constantín bajó con tres grandes mochilas hasta el sótano en donde está la bodega y entró fácilmente al usar una llave maestra. Ya en la bodega, metió las 45 botellas en las mochilas, tapándolas con toallas de la habitación para que no se rompieran.

Al volver a la habitación, se dieron prisa y se marcharon. A las cinco y media de la mañana salieron del hotel. Se fueron andando, Constantín con una mochila en la espalda y las otras dos mochilas en las manos. Se marcharon a toda prisa, sin tomar el famoso desayuno de Atrio que ya habían pagado.

El robo se descubrió a las pocas horas. La policía vio las imágenes de los ladrones en las cámaras de seguridad, las caras tapadas con mascarilla, ella con una peluca. Constantín aparecía con pelo, pero cuando fue detenido estaba sin él.

Los agentes comprobaron el documento con el que se había inscrito Priscila Lara, y vieron que era falso. Pensaron que quizá también era falso el número de teléfono, pero vieron que no, que esa era una pista fiable. Comprobaron que el teléfono móvil era de prepago. Gracias al teléfono lograron la dirección de correo electrónico de la miss y su documento de identidad verdadero, con el que adquirió el aparato y donde figura que es natural del estado mexicano de Michoacán. Los agentes vieron las cámaras de seguridad del lugar en donde compró el teléfono móvil y comprobaron el parecido con las imágenes captadas en el Hotel Atrio.

Al hacer el seguimiento al teléfono móvil supieron que habían estado cuatro veces en Cáceres: el 1 y 13 de junio, el 12 de agosto y el 26 de octubre, ésta última la fecha del robo. Según los investigadores, antes del robo habían ido esos otros tres días al Hotel Atrio para ver cómo podían entrar en la bodega para llevarse las botellas elegidas.

Los agentes vieron que Priscila no tenía antecedentes penales, ni había sido detenida por robos; pero su pareja sí estaba relacionado precisamente con robos de botellas caras de vino y licores. Le vinculaban con dos robos cometidos en tiendas gourmet del barrio de Salamanca de Madrid, y en una tienda del aeropuerto de Ginebra (Suiza).

La pareja de sospechosos vivía en un piso en Madrid, con una hija de Constantín nacida de otra relación sentimental; pero cuando fueron a buscarles al piso ya se habían ido. Escaparon en coche a distintos países de Europa, hasta que el 18 de julio fueron detenidos en Croacia, gracias a una operación policial internacional, tras emitir una euroorden de detención el Juzgado número 4 de Cáceres que instruye la causa.

Llevados los dos detenidos, la semana pasada ante la autoridad judicial en Cáceres, se decretó su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza. Los dos están en el Centro Penitenciario de Cáceres.