Cáceres es la segunda provincia de España con más armas de caza por habitante

La provincia de Cáceres tiene una gran tradición en la caza, y según los datos aportados por la Guardia Civil, las armas autorizadas en esta provincia en el año 2021 son: 10.438 rifles y 44.783 escopetas. Un total de 55.221 armas, que al relacionarlas con los 388.424 habitantes de la provincia da una proporción de 7,03. La tercera provincia con más armas de caza es Teruel con 7,04. La cuarta es Soria, con 7,3; la quinta es Badajoz con 7,4 armas por habitante. La sexta es Ciudad Real con 8 armas por persona.

La media a nivel nacional es de 16 escopetas y rifles por habitante. La provincia que está en las antípodas con respecto a Cáceres y Cuenca es la de Barcelona, en donde hay un arma de caza por cada 57 habitantes, le sigue Las Palmas con 55, y Tenerife con 50.

Los datos de las armas de caza autorizadas por provincia, forman parte de la respuesta del Gobierno a una pregunta formulada por el senador de Compromís Carles Mulet García.

El que la provincia de Cáceres sea una de las que tiene más armas por habitante, es una prueba de la afición que hay por la caza, como aseguraba el periodista Fernando García Morales en el libro 'Cáceres. La historia viva': «Cáceres fue de antiguo una tierra de cazadores. Pero no me refiero a los de caza mayor, a los monteros, sino a los de caza menuda, a los cazadores modestos a los que, por tradición, se les dejaba entrar a cualquier finca para ejercer su afición y de paso ver si conseguían alguna carne para el modesto puchero». García Morales escribió sobre populares cazadores de Cáceres como Antonio Costillares, 'Carbonilla', el tío Toro, el tío Crespo, Fernando Gutiérrez Pambo 'El Guti'... García Morales afirmaba que había conocido a cazadores cacereños, «cuyos lances cinegéticos llenarían un libro, porque todos eran personajes populares. El señor Jordán, de oficio carpintero, solía cazar con sus hijos y era hombre de tan mala suerte en los lances, que cuando se le preguntaba que qué tal se les había dado el día, su mejor respuesta era: 'A Dios gracias, todos volvimos vivos'».

En las preguntas del senador Mulet al Gobierno sobre caza, hay una en la que pide datos sobre el número de personas que han recibido disparos accidentales por la actividad de caza con arma, durante el año 2020 y el año 2021 hasta el 15 de febrero. En la respuesta se indica que hubo tres muertos por accidentes de caza, en Cuenca, Orense y Zaragoza.

La provincia de Cáceres aparece en la relación de accidentes con lesión grave. Aquí figuran 13 heridos graves en toda España, uno de ellos en la provincia de Cáceres y otro en la de Badajoz. Hubo más accidentados en la provincia de Guadalajara, con dos personas atendidas por heridas de gravedad. En la relación de accidentes con lesión leve, figuran siete provincia, entre las que se encuentran Cáceres y Badajoz, cada una con un caso.

¿Había antes más armas de caza en la provincia de Cáceres? El cazador y escritor cinegético Salvador Calvo Muñoz, que reside en Cáceres, afirma que antes había muchas menos armas que ahora. «El mercado está saturado – asegura –. No sabemos qué hacer con las armas antiguas: si quedarnos con ellas o entregarlas, para su destrucción, a la Guardia Civil. Antes, hace medio siglo, había tantos cazadores como ahora; pero se han empeñado en que seamos 'especie a extinguir'; como las otras especies, que de tanta protección, desaparecen. Ha habido tres tipos de escopetas de caza: paralelas, superpuestas y repetidoras. Hoy se impone la repetidora, por más que los tradicionalistas nos empeñemos en usar solo paralelas, o como mucho superpuestas. Antes, el cazador de caza menor tenía una o dos escopetas. Hoy tal vez una media de cuatro. En mi casa hay seis escopetas, si bien somos dos los que cazamos. Amén de que los cazadores de caza mayor usan, normalmente, el rifle».

Señala que cada escopeta tiene su carnet de identidad y pasan controles por la Guardia Civil cada cinco años, junto a la renovación de la licencia de armas.

Uno de los mayores defensores de la caza en la provincia de Cáceres fue el recordado Juancho Viola al que le gustaba citar las palabras que Cervantes puso en boca de Don Quijote en una conversación con Sancho Panza: «La caza se puede hacer sin perjuicio de nadie y con gusto de muchos. Así que, oh Sancho, muda de opinión y cuando seáis gobernador ocupaos en la caza y veréis cómo os vale un pan por ciento».

Lo cierto es que la despoblación está afectando al mundo de la caza en la provincia de Cáceres, y ahora hay alrededor de 11.000 licencias de caza, cuando hace 20 años había unas 18.000. No obstante ese número no significa el número de cazadores, ya que un mismo cazador puede tener hasta ocho licencias de caza.

Puede que disminuya el número de cazadores de Cáceres, pero la Federación Extremeña de Caza señala que cada vez vienen más cazadores de fuera a los cotos cacereños. El auge se demuestra en que ha aumentado el número de superficie dedicada a la caza: si en 1987 en la provincia había 1.364.436 hectáreas de cotos, en 2019 había aumentado hasta llegar a 1.614.000 hectáreas.