Arranca la obra que permitirá mejorar el bombeo desde el Almonte a Cáceres

La estación elevadora del Almonte entró en servicio en 1993. La capacidad actual es de 25.000 metros cúbicos al día. Con los nuevos equipos se espera llegar a 36.000 metros cúbicos, lo que supone un 44 por ciento más.

Las deficiencias han quedado de manifiesto en los últimos años con «un estado de deterioro muy avanzado» al que ahora se pondrá fin. En algunas bombas sumergibles ha habido que acometer reparaciones de 55.000 euros por unidad. No solo era el coste económico sino que ello obligaba a paradas de los equipos con lo que el servicio queda interrumpido. Las bombas estaban presentando problemas mecánicos, en gran parte debido a su antigüedad y por el «gran desgaste» de trabajar a 3.000 revoluciones por minuto «sin equipo de reserva», se destaca en la memoria técnica del proyecto elaborado por Canal. El adjudicatario de la obra es la unión temporal de Empresas (UTE) Martín Casillas SLU-OPS Infraestructuras y Servicios Hidráulicos. La inversión se eleva a 1,55 millones, aunque se trata de una actuación desglosada en dos lotes y el bombeo del Almonte es uno de ellos, con una partida valorada en 765.000 euros, con impuestos incluidos.

Otra mejora adicional es la relativa a la ampliación del bombeo desde la estación de tratamiento de agua potable (ETAP) hasta el depósito de la Montaña. La misma se cuantifica en 786.500 euros.

Con la obra del Almonte la capacidad de bombeo se aumenta en esos 11.000 metros cúbicos diarios. El dato, como tal, no dice mucho pero sí es ilustrativo por su significado, ya que facilitará el equivalente al consumo diario de la capital en época estival. De esta forma, las garantías para el suministro están más definidas aunque el trasvase diario puede rondar los 2.500 ó 3.000 euros diarios solo en coste de energía y en función del precio de la electricidad.

«La obra del Almonte empezó hace dos semanas. El plazo es de 20», informó ayer el Ayuntamiento a consultas de HOY. Según está versión se reduciría el plazo previsto, que marca un máximo de ocho meses. Desde la constructoras confirmaron que aunque las máquinas no están aún sobre el terreno los trámites del inicio de obra se han activado.

Las necesidades que se han puesto de manifiesto llevan a cambiar las bombas para optimizar el rendimiento y a la vez se rediseña el sistema «para que utilizando las canalizaciones existentes se pueda bombear directamente a la ETAP sin pasar por el Guadiloba». Esto supone llevar el agua, si es preciso, desde el pantano de Alcántara hasta la estación depuradora y de allí a los hogares de los cacereños.

Se incluye la construcción de un edificio de control adosado al actual. Con la nueva instalación se podrán realizar paradas en labores de mantenimiento sin que se vea afectado el caudal necesario que dé continuidad al suministro. Se resalta en la memoria que con una aportación de 18 horas diarias Cáceres se podrá abastecer en verano solo del Almonte. Hay que recordar que esta no es la obra definitiva de abastecimiento, cuya última alternativa anunciada en junio pero sin partida presupuestaria del Estado aún es aprovechar parte del proyecto de Portaje en otro trasvase desde el pantano de Alcántara.

En la actualidad, el Guadiloba se encuentra al 46 por ciento de su capacidad, tras haber ganado más de tres hectómetros cúbicos desde octubre con las lluvias. La situación ha mejorado notablemente al situarse con 9,3 hectómetros, frente a los apenas seis de hace cuatro meses.