Cáceres sigue siendo la provincia con menos criminalidad de España

El pasado viernes la detención del joven Andrés Ramajo por su supuesta participación en el conflicto armado de Ucrania y el llamativo despliegue policial en su domicilio sobresaltaban a la ciudad, poco acostumbrada a los sucesos de gran magnitud. La ciudadanía vive tranquila, sin sensación de desprotección o miedo. Desde hace dos años la provincia de Cáceres figura en las estadísticas del Ministerio de Interior como la provincia más segura de España y, según el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, los cacereños bien pueden estar viviendo en el territorio más seguro de Europa, porque España ha registrado los mejores datos en índice de criminalidad de todos los países del continente.

Hace dos semanas el Delegado del Gobierno en Extremadura anunciaba que la criminalidad había bajado el año pasado a niveles de 2003. Esta tasa delictiva ha descendido hasta las 25,7 infracciones penales por cada mil habitantes, lo que supone un 3,8% menos que en el 2013.

El teniente coronel jefe de la Comandancia de Cáceres, Laureano Martín, confirma los datos que le conceden a la ciudad la vitola de segura. Asegura que en la provincia de Cáceres la tasa de criminalidad bajó el año pasado a 17'94 por cada mil personas, cuando la media nacional está en el 34'13, «un año más se ha bajado la cifra en esta provincia, ya que en el año 2013 la tasa fue de 18,52 delitos por cada mil personas».

La Guardia Civil atiende directamente la seguridad en 220 localidades cacereñas, ya que de las ciudades de Cáceres y Plasencia se encarga la Policía Nacional. En total, el Instituto Armado tiene competencias sobre el 66% de las personas que viven en la provincia.

El comisario provincial Luis Ochagavía señala que a la hora de hablar de datos de criminalidad hay que tener en cuenta que hay estadísticas oficiales de delincuencia desde hace 15 años, en las ciudades competencia del Cuerpo Nacional de Policía. Indica que desde el año 2000 al 2006 se vio que había un aumento progresivo de criminalidad en Cáceres y Plasencia, hasta alcanzar en 2006 un total de 5.565 infracciones penales cometidas en las dos ciudades; pero desde el 2006 se ha ido bajando hasta llegar el año pasado a 3.300 delitos contabilizados. Ochagavía destaca que ese descenso coincide con el número de agentes, «desde el año 2000 se vino produciendo un significativo descenso del personal del Cuerpo nacional de Policía, y a mediados de la década comenzó a invertirse la tendencia con un progresivo incremento de plantilla». Los agentes también cuentan desde hace poco con unas buenas infraestructuras, ya que hace dos años se inauguraron las nuevas dependencias de la Comisaría en Cáceres.

En esta provincia hay 1.200 guardias civiles velando por la seguridad de los cacereños, repartidos en 74 acuartelamientos. Los que trabajan en Cáceres tienen una comandancia moderna. El teniente coronel Laureano León cumple en marzo un año en este destino y en este tiempo ya casi ha visitado todos los acuartelamientos. El objetivo de estas visitas es conocer de primera mano las deficiencias que pudieran existir en las instalaciones y en las viviendas de los guardias civiles, con el objeto de ser subsanadas, además de valorar los medios humanos y materiales que disponen en cada zona, comprarándolos con el nivel de delincuencia. El pasado 18 de febrero visitó los acuartelamientos de Deleitosa, Castañar de Ibor, Peraleda de la Mata, Villar del Pedroso y Valdelacasa de Tajo.

Zonas rurales

Laureano Martín destaca que para seguir con buenos datos en la lucha contra la delincuencia en esta provincia, tienen que seguir controlando la zona rural, «con los grupos ROCA estamos teniendo éxito a la hora de disminuir los robos en las zonas rurales, el año pasado se ha creado un cuarto grupo en esta provincia y ahora hay en Navalmoral de la Mata, Trujillo, Plasencia y Coria». El año pasado lograron bajar un 25% los robos en fincas y explotaciones en el campo.

El comisario Luis Ochagavía sostiene que la seguridad ciudadana se asienta en cuatro pilares fundamentales: la labor preventiva, la colaboración ciudadana, la eficacia policial en la represión de los delitos y la actuación judicial. Destaca en la labor preventiva que al contar con más plantilla puede tener más patrullas en la calle, haciendo hincapié también en la colaboración de los agentes de la Policía Local de Cáceres y Plasencia. Señala que en los últimos años ha aumentado la colaboración ciudadana permitiendo impedir o descubrir infracciones penales.

Este cargo de la Policía Nacional También valora que la eficacia policial ha crecido, «desde alrededor de un 35% de los delitos esclarecidos a principios de este siglo, hasta llegar en el 2014 a casi seis de cada diez delitos resueltos». La actuación en los juzgados hace que con las condenas se logre retirar de la calle a delincuentes profesionales.