Urbanizar el entorno de la piscina de la margen derecha de Badajoz costará 756.000 euros

Hace 15 años que los vecinos de la avenida Adolfo Díaz Ambrona observaron con ilusión cómo las máquinas comenzaban a trabajar en los solares que quedan vacíos entre el Puente de Palmas y el Hotel Río. Se instalaron alcantarillas, transformadores, aceras, etc. Pero la obra paró porque la empresa promotora fue liquidada y la zona está abandonada desde entonces. Esto cambiará en los próximos meses porque el Ayuntamiento ha decidido llevar a cabo la urbanización por su cuenta aunque el coste ha sido asumido por los propietarios de los terrenos. La inversión será de 756.000 euros y servirá para dar un cambio completo al entorno de la nueva piscina de la Margen Derecha.

El Ayuntamiento de Badajoz sacó a concurso las obras en enero y la semana pasada se cerró el plazo para que las empresas constructoras presentasen sus ofertas. Este miércoles se reunió la mesa de contratación, por lo que se espera que en las próximas semanas se adjudiquen los trabajos y comiencen en breve. El plazo de ejecución de los mismos es de seis meses, así que la transformación debería completarse antes de que finalice el año 2021.

El Consistorio pacense ha decidido promover esta urbanización a raíz de las obras de la nueva piscina. El primer intento fue en 2006. Entonces, según recoge la memoria de la obra, Urvicasa comenzó los trabajos, pero paró y esas mejoras han quedado abandonadas. En concreto, al no tener mantenimiento, la vegetación ha invadido lo que debían ser los viales, se han roto los bordillos y las tapas y arquetas, se incendió la caseta prefabricada destinada a contener los transformadores e incluso se han producido robos de las instalaciones eléctricas. En conclusión, las labores de hace 15 años no se pueden aprovechar.

El área afectada son los solares de Adolfo Díaz Ambrona entre el Puente de Palmas y las instalaciones hoteleras junto al Puente de la Universidad. Se trata de terrenos por detrás del pabellón Juancho Pérez y la futura piscina. En el callejero pacense los futuros viales, que actualmente son de tierra en su mayoría, coinciden con las calles Moreras y Bajadas las Moreras. Se trata de una zona con atractivo urbanístico porque, en la actualidad, linda con el parque de la margen derecha. Según el Plan General, están previstos bloques de pisos de seis alturas.

La reforma incluye viales para vehículos y aceras para los peatones, la instalación de un nuevo saneamiento, el abastecimiento de agua, el sistema de energía eléctrica, la colocación de alumbrado público y otras instalaciones de telecomunicaciones y también las canalizaciones de gas.

A esto se une una zona de jardinería, la más próxima a la verja del parque del río, con mobiliario público, es decir, bancos y papeleras.

Los planos del proyecto de reforma muestran que todos los solares, que abarcan 11.300 metros cuadrados, estarán rodeados por un vial perimetral. Además habrá tres calles que bajen desde la avenida Díaz Ambrona hasta la valla del parque del río. La primera coincide con Bajada Las Moreras que es el vial que ya existe, la bajada junto al Puente de Palmas. Las otras dos son de nueva construcción a ambos lados del pabellón Juancho Pérez.

A la hora de urbanizar una nueva parcela, existen dos posibilidades. Un promotor privado puede instalar las tuberías, los viales y las aceras por su cuenta o el Ayuntamiento puede promover la urbanización y luego pasarle el coste de la misma a los dueños de los terrenos.

Este segundo ejemplo ha sido en el caso en los solares de Díaz Ambrona, aunque los propietarios ya han adelantado el pago de las obras. Hay varios titulares de parcelas y hace dos años suscribieron un acuerdo con el Ayuntamiento. Desde entonces los propietarios han pagado sus cuotas de urbanización, incluido el Ayuntamiento que tiene una pequeña parte de la participación valorada en unos 11.000 euros.

¿Y cuándo esté urbanizado? Cuando el Ayuntamiento termine las calles, los propietarios de los terrenos podrán construir. El Plan General Municipal prevé edificios de seis alturas con uso residencial, aunque también hay espacio para oficinas, comercios u hostelería, lo que podría revitalizar este área.