Un pacense transforma sus cuatro peluquerías en pisos para turistas

En Dalia, así es como se llama el primer apartamento turístico que este pacense puso en marcha con ayuda de su mujer Elisabet Haut. Los folletos turísticos, varios sofás, una bici estática y hasta un jacuzzi han sustituido a las tijeras y los secadores en los aparamentos Guadiana. «Era muy esclavo de mi anterior negocio, tenía cuatro peluquerías, me pasaba el día trabajando y quise dar un cambio a mi vida».

Su pasión por viajar, unido a la carencia de este tipo de alojamiento que detectaron en Badajoz, les impulsó a transformar sus peluquerías en viviendas. «En junio de 2023 abrimos el primero, fue bien y en un año hemos abierto los demás», explica este empresario.

El último, ubicado en la calle Alfonso XIII, abrió en junio y se ha sumado a los que ya tenían en la barriada de Llera y San Roque.

Estos se suman a otros que han proliferado en el último año en la ciudad, aumentando así la oferta de alquiler vacacional también en el Casco Antiguo.

Allí también se han convertido antiguos locales comerciales, como los apartamentos San Juan, situados en la calle que le da nombre, y que abrieron hace seis meses. Aquí han convertido sus tres plantas en 14 habitaciones que acogen a visitantes cada semana. «Desde que abrimos estamos ocupados todos los fines de semana, llevamos todo el verano completos, pero la época donde hay mayor demanda hay es Carnaval», revela Irene.

Todo apunta que cada vez son más los pisos turísticos en la ciudad, aunque el Ayuntamiento no ha respondido a HOY sobre el número de licencias turísticas concedidas en el último año.

Esta reconversión es el resultado de la legislación que regula el uso de los inmuebles solucionar el problema que causan en otras ciudades. «La ley obliga a que los suelos terciarios sean los únicos que pueden destinarse a albergar apartamentos turísticos», argumenta la gestora de los apartamentos San Juan, Ana Fallola.

Esta norma llegó hace unos años para evitar el alquiler de viviendas propias como pisos turísticos. «Hace varios años se puso de moda alquilar las viviendas en comunidades de vecinos para alojar turistas, y esto escapaba a cualquier tipo de control, que hacía perder calidad turística en estos alojamientos», zanja.

El suelo terciario ha facilitado que estos pisos proliferen en Badajoz, que tiene un Casco Antiguo con numerosos locales comerciales cerrados. «Para nosotros esto es muy positivo porque ayuda a recuperar la vida que habían perdido con el cierre de comercios», apunta desde SOS Casco Antiguo, Luis Pacheco.

Para mejorar la calidad del servicio los Ayuntamientos y la Junta de Extremadura obligan a los propietarios de los inmuebles a cumplir con una serie de medidas. Por ejemplo, los estudios deben ser al menos de 17 metros cuadrados.

De esto saben bien José María Tinoco y Elisabet Haut, que reformaron sus locales para cumplir con la normativa. «Hay que conocer bien la normativa del Ayuntamiento y de Turismo, y dejarlo en manos del arquitecto», relata José María que tuvo que adaptar por completo sus locales para cumplir con normativas como los cuatro metros de largo que Turismo exige en los baños.

Además, con sus apartamentos buscan diferenciarse del resto. De ahí que cada alojamiento esté dirigido a un tipo de clientes. «Buscamos diferenciarnos del resto, nos preocupamos por el cliente, por eso nuestra atención es personalizada. Queremos que el visitante se sienta como en casa», subraya Elisabet convencida de que esto es la clave para un turismo de calidad y sostenible con los ciudadanos.