Los cereceros recibirán hasta 2.500 euros del Gobierno por hectárea dañada

La orden que se publica en el BOE de hoy señala que Agricultura concede ayudas directas a profesionales del campo extremeño de tierras de cultivo de secano (cereales de invierno) y a los cultivos de arroz y tomate de industria y a la cereza del Jerte. Las comunidades autónomas deben enviar al Ministerio de Agricultura antes del 15 de octubre los datos de superficies de cada agricultor para establecer las superficies subvencionables que recibirán ayudas.

De forma concreta, establece que en el caso de tierras de secano, la superficie subvencionable se corresponderá a las hectáreas de tierra de cereales de secano, excluidos los pastos temporales. Se establece un máximo de 300 hectáreas secano subvencionables por beneficiario.

En el caso del arroz, la superficie subvencionable se determinará según la solicitud única de este año 2023 La ayuda se otorgará a las hectáreas en las que no se haya realizado la siembra de este cultivo en 2023 respecto a la zona habitual de cultivo arrocero. En Extremadura este año hay alrededor de 10.000 hectáreas de arroz por la escasez de agua. Normalmente se viene plantando alrededor de 21.500 hectáreas. En la anterior campaña fueron apenas 2.500 las cosechadas.

Para los tomateros, la orden del Gobierno estipula que la superficie con ayudas tomará como referencia las parcelas declaradas en la solicitud única 2023, con la diferencia entre la superficie determinada para la ayuda asociada al tomate de industria en la solicitud única de 2023 y la correspondiente a la superficie determinada en la solicitud única de 2021. «La ayuda se otorgará en función de la proporción de superficie que no se haya realizado la siembra de este cultivo en este año», se recoge.

Para las ayudas a los frutales y los frutos de cáscara se establece un máximo de 70 hectáreas subvencionables. Contarán con una dotación presupuestaria total de 81 millones para el conjunto de fruticultores españoles, se recoge en el BOE. Se establece un importe máximo de 137,5 y 46 euros por hectárea para frutales y frutos de cáscara, respectivamente.

Los cereales de secano, el arroz, el tomate y los frutales de pepita y de hueso se reparten entre varias comunidades autónomas, por lo que serán agricultores de varias regiones españoles los perceptores de las ayudas. Pero hay una que otorga el Gobierno que llegará exclusivamente a Extremadura, a los cereceros del Valle del Jerte y La Vera. Hay 8 millones a repartir entre alrededor de 8.600 hectáreas, aunque no todas cumplen con los requisitos para recibir subvención.

Esta ayuda, hay que recordar, se ha fijado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez a causa de las abundantes lluvias que regaron el nordeste extremeño entre finales de mayo y la primera quincena de junio. Propiciaron que alrededor del 80% de la producción de la cereza se haya visto afectada seriamente, según la organización agraria UPA-UCE. En dinero, unos 70 millones de euros en pérdidas.

Se establece un máximo de 20 hectáreas de cultivo de cereza subvencionable por beneficiario. El importe máximo por hectárea se establece en 2.500 euros. Los titulares de parcelas de cereza deben estar al corriente del cumplimiento de sus obligaciones tributarias y con la Seguridad Social.

Es importante reseñar que las explotaciones que cuenten con un contrato de seguro agrario recibirán el 100 % del importe de la ayuda. Las que no lo tengan, el 50%. No se concederán ayudas cuando el importe a percibir por beneficiario resulte inferior a los 200 euros.

El pasado 8 de junio, cereceros cacereños se manifestaron frente a la Consejería de Agricultura, en Mérida para pedir ayudas directas de unos 4.000 euros por hectárea y mejora de los seguros agrarios para este cultivo.