¿Habrá que pagar por disfrutar de Monfragüe?

Los responsables de varias instituciones públicas apelaron ayer a las posibilidades de la Red Natura 2000 como generador de riqueza y de empleo e insistieron en la necesidad de desterrar la sensación de que esos espacios pueden ser un freno para el desarrollo.

El presidente de la Junta extremeña, José Antonio Monago, presidió en Cáceres el acto de presentación del proyecto Life+ (financiado por la UE) 'Infonatur', una iniciativa para poner en valor esos espacios en la que participan, además de la Junta, la Diputación de Lérida, el Patronato de Turismo de la Costa Brava y la Agencia EFE.

Monago subrayó que «sólo lo que es sostenible es desarrollo», e insistió también en la necesidad de poner fin al «todo gratis» que impera en Extremadura para el disfrute de los recursos naturales, haciendo referencia al caso del Parque Nacional de Monfragüe, donde todos los servicios son gratuitos para los usuarios.

En el acto de presentación del proyecto 'Infonatur' intervinieron además la alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado; el presidente de la Agencia EFE, José Antonio Vera; la directora de la Fundación Biodiversidad, Sonia Castañeda, y el responsable de Desarrollo Local y Fomento de la Diputación de Cáceres, Samuel Fernández.

Base del desarrollo

El presidente extremeño señaló que la Red Natura 2000 debe ser la base sobre la que se cimente el desarrollo y el futuro de muchas localidades, y la mejor herramienta para asentar las poblaciones rurales.

José Antonio Monago subrayó que la Red no debe ser ni un obstáculo ni una rémora para el desarrollo y añadió que sus espacios no son parte del problema y sí pueden ser parte de la solución para superar las dificultades económicas actuales.

Por otro lado el presidente de la Asamblea de Extremadura, Fernando Manzano, demandó una simplificación de la normativa medioambiental, así como la elaboración de leyes más claras, y señaló que el ministro de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, está haciendo un esfuerzo en este sentido.

Señaló que es un firme defensor de acercar la administración a los ciudadanos, porque «la administración debe estar siempre al servicio de los ciudadanos y nunca al contrario». Razón por la que -añadió- considera conveniente simplificar la normativa medioambiental y los métodos para medir los daños medioambientales.