ASÍ NOS VA

NOS FALTA UN HIMNO DE BATALLA

JUAN LÓPEZ-LAGO

Jueves, 8 de septiembre 2011, 02:15

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Me tocó aprender el himno de Extremadura en quinto de egebé, calculo que allá por 1985, cuando de repente nos colocaron una asignatura nueva para conocer nuestra comunidad autónoma.

Memorizando que aquí vivimos del regadío, la ganadería y estas cosas, les confieso que no me percaté de mi identidad hasta que no salí fuera a estudiar la carrera. Me di cuenta de que uno es realmente extremeño cuando está lejos, reivindicando su origen cuando alguien del norte te confunde con un andaluz por el acento. Pero no les mentiré, un sentimiento nacionalista extremeño nunca anidó en mí. Tendría que abstraerme -o emborracharme- demasiado para llorar como lo hacía uno de mis compañeros de piso, Carlos, un gallego que cuando sonaba el 'minha terra galega' apretaba las mandíbulas para no desmoronarse melancólico en mitad de la capital de España. En el fondo lo miraba con envidia.

Quizás un emigrante extremeño se tambalee por la nostalgia al escuchar '¡nuestras vooooces se alzan...!', pero a mí, aquí en Badajoz, esta letra no me estremece. Entre el pudor y la ignorancia, observen que casi nadie la canta en los actos.

Echo de menos himnos no oficiales como el referido antes de Siniestro Total, el Pongamos que hablo de Madrid o, no sé, el Asturias patria querida. Extromoduro hizo un esbozo, pero entiendo al que no derrame una lágrima al escuchar ¡tus mujeres me la ponen extrema y dura...! Sueño que algún día surja ese himno extremeño menos solemne, que no salga en el DOE, de batalla, y que todos los cantemos.

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