La fotovoltaica de la fábrica de diamantes de Trujillo inicia su tramitación

Diamond Foundry Europe ha presentado ante la Junta de Extremadura la solicitud de autorización administrativa previa y el estudio de impacto ambiental de la fotovoltaica de autoconsumo sin excedentes Arroyo Caballo, en Trujillo. La documentación se somete ahora al procedimiento de información pública para continuar con su tramitación, entre lo que se encuentra la declaración de impacto ambiental.

La planta fotovoltaica plantea ocupar una parcela de 48 hectáreas al norte de Trujillo, junto a la autovía A-58. Contará con 23 megavatios (MW) de potencia instalada (aunque en la documentación se recoge hasta 25 MW), con 107 inversores de 215 kilovatios cada uno y 38.520 módulos de 650 vatios, pero con un sistema de control que impedirá que la potencia de salida supere los 20 MW. Las obras, una vez conseguidos los permisos necesarios, tendrán una duración estimada de doce meses.

También contará con un sistema antivertido para que la energía excedentaria no se inyecte a la red de distribución. Con ello la empresa no tendrá la condición de productor de energía, sino que toda la electricidad generada será para consumo propio.

Asimismo, el proyecto incluye una línea subterránea de evacuación de 3,3 kilómetros de longitud que conectaría el último centro de transformación de la planta fotovoltaica con la subestación a ubicar en la nave industrial de la fábrica de diamantes.

El presupuesto de ejecución material es de 13,7 millones de euros, pero con los gastos generales, el beneficio industrial y los impuestos la actuación estaría cerca de 20 millones de euros.

La fotovoltaica dará servicio a unas instalaciones que requerirán de gran cantidad de energía para su funcionamiento. La planta de Diamond Foundry proyecta la fabricación de diamantes sintéticos mediante el método de deposición química de vapor en reactores de plasma. La central prevé un funcionamiento a tres turnos, durante todos los días del año.