La mitad de las farmacias de Cáceres ya abren 12 o más horas toda la semana

La tendencia ha crecido y desde entonces se han multiplicado los establecimientos que ofrecen un horario prolongado, facilitando el acceso a estos productos de primera necesidad. Según los datos que proporciona el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cáceres la mitad de las 38 boticas de la ciudad ofrecen turnos de 12 o 24 horas.

En este último caso, las que no cierran nunca son dos, la citada de Moctezuma y la situada en el número 24 de Antonio Hurtado. Otras 17 se han sumado en los últimos años a la apertura de un horario comercial de 12 horas, que habitualmente se extiende desde las nueve y media o diez de la mañana hasta las diez de la noche. Todas ellas, tanto las de 12 como las de 24 horas abren los sábados y los domingos de manera obligatoria.

Según el gerente del Colegio de Farmacéuticos de Cáceres, Francisco Carretero, en los últimos tiempos cada vez más farmacias se han ido incorporando al horario extendido, en virtud del decreto 26/2015 de 24 de febrero que garantiza una atención farmacéutica continua, una flexibilidad horaria, con horarios mínimos obligatorios y la posibilidad de permitir horarios ampliados voluntarios. En este decreto también se regularon los servicios de urgencia y se permitió la agrupación de zonas para mejorar la atención. Según la normativa vigente, de ámbito autonómico, entre un establecimiento y otro debe haber, al menos, 250 metros de distancia. Esta medida también se aplica con respecto a los metros que debe haber entre una farmacia y centros sanitarios como un hospital o un centro de salud. Las guardias se establecen por áreas de salud. En Cáceres y Plasencia, los dos núcleos de población más grandes de la provincia no tienen farmacia de guardia al existir las farmacias de 24 horas, pero sí en resto de las localidades de la provincia, en donde continúa este sistema para dar cobertura a la población.

Francisco Carretero señala que este cambio en el ámbito de la atención farmacéutica se debe a que «hay demanda». Las farmacias han diversificado enormemente su oferta en los últimos tiempos, con muchos productos de parafarmacia o servicios adicionales como nutrición u óptica. En una farmacia ya no se adquieren solo medicamentos, sino que ha crecido la venta de artículos de cuidado personal.

Además del régimen de apertura de estos establecimientos lo que ha cambiado en los últimos tiempos ha sido la distribución de las mismas, atendiendo a los cambios en la propia ciudad. Según los datos facilitados por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cáceres, desde el año 2000 ocho establecimientos se han ido desde el centro urbano de la capital hasta barrios de nueva creación.

La última en trasladarse fue la farmacia Castel, un verdadero clásico del centro histórico que cerró el pasado mes de septiembre en la Plaza Mayor, un entorno en el que cada vez hay menos vida ciudadana y más turismo y hostelería. No fue un cierre, sino que esta farmacia se marchó a las instalaciones del centro comercial Carrefour, a donde se trasladaron ocho de sus nueve empleados. La farmacia de Pintores, la de San Antón y la de la calle San Pedro cubren ese eje del corazón histórico de la ciudad.

En Extremadura, la ratio de farmacias por habitante es de 6,1 boticas por cada 10.000 habitantes. Esto la sitúa entre las comunidades autónomas con mayor densidad de farmacias.