El nuevo carril bici de Badajoz gusta a los ciclistas

Unas obras que aún no han terminado en otras zonas, como la avenida de Entrepuentes o la carretera de Olivenza, donde aún trabajan en el asfaltado del nuevo carril. Por el momento tan solo se puede circular por algunos tramos y no será hasta el año 2027 cuando finalice el proyecto de la nueva red ciclista.

Hasta entonces los nuevos carriles están inconexos, algo que tiene descontentos a algunos usuarios. «Solo está en algunas zonas y eso hace que lo utilice poco. Supondrá un adelanto y una mejora cuando el carril bici esté por toda la ciudad», afirma Mario Rey, que circulaba con su patinete eléctrico por la vía ciclista de Sinforiano Madroñero con destino a San Roque. «No hay conexión para llegar hasta San Roque, al final de la avenida termina el carril bici y tendré que ir por la carretera, pero eso es un peligro, pasamos miedo porque muchos coches no respetan nada».

Pese a ello, la mayoría de los usuarios agradecen que ya se pueda circular por tramos como el de Sinforiano Madroñero. «Ahora no tenemos que esquivar árboles, farolas, ni bancos. Estamos protegidos y nos da seguridad porque lo de antes no era un carril bici», exclama Juan Bautista, que también circula con patinete eléctrico y asegura que el nuevo carril bici da mucha seguridad.

«Es un carril que tiene demasiado zigzag, en las paradas de autobús si hay gente tienes que parar y eso entorpece un poco», aporta el ciclista Manolo Contreras, que regresaba desde Elvas con su bici de carretera y aprovecha algunos tramos del carril en su vuelta a casa.

Un regreso que también es más seguro para Andrés Vélez. Él monta en bicicleta de montaña y cuenta que se siente más seguro por esta nueva vía.

«Esto es algo que se debería haber hecho mucho antes, aunque sería conveniente que los políticos pacenses dieran una vuelta por otras ciudades para que vean cómo es realmente un carril bici», subraya este ciclista, quien señala que deberían seguir un modelo de carriles como el de Sevilla.

Una postura en la que coincide con Rey. «Es una ciudad en la que está muy bien hecho y puedes llegar a cualquier punto en bicicleta o patinete sin problema», afirma.

Los pacenses tendrán que esperar cuatro años para poder llegar a cualquier lugar de la ciudad sin abandonar la vía ciclista, ya que las obras se realizarán en diferentes fases. «Es un error que en cada zona hagan un carril diferente porque luego no tiene nada que ver uno con otro», alerta Mario.

Prueba de ello es el de La Pilara, donde no solo cambia el color, sino que en algunos tramos está incluido en el acerado.

A diferencia de la vía ciclista anterior, el nuevo carril sí cuenta con separación física con la calzada. Además, la pintura en el suelo indica el paso ciclista y también cuenta con señales verticales. «Está muy bien señalizado dónde hay parada de autobús, dónde hay un paso de peatones... y son señales que avisan con la suficiente antelación», comenta Bautista.

La Plataforma Carril Bici en Badajoz, que nació para promover su creación, indica que la señalización no es tan correcta en todos los puntos. «Los cruces y los puentes necesitan más señales. Son las zonas más complicadas para circular en bici y donde más riesgo corremos», explica desde la plataforma José Manuel Recio, quien considera que en las rotondas y puentes sería más conveniente cerrar los carriles para proteger al ciclista, ya que estos lugares están pensados sólo para los coches.

El tramo de la avenida Entrepuentes es otra de las zonas que Recio considera mejorable. «El carril aquí pasa por unos jardines y han cortado algunas raíces para que la vía esté lo más firme posible, pero lo ideal sería hacer el carril más elevado para salvar estos árboles, que además aportan sombra», explica Recio.

Con todo, los usuarios perciben que su mayor problema siguen siendo los conductores de los coches. «No son conscientes de que las bicicletas también circulan por la ciudad y que no siempre tienen ellos la preferencia. Yo he visto e vehículos aparcados en los carriles bici», relata Manuel.

Los usuarios confían en que el paso del tiempo y el aumento de kilómetros de carril ayude a los conductores a tomar conciencia. «Es muy necesario un carril bici, somos una ciudad grande y esto nos viene bien, aunque aquí el problema está en que luego falla el mantenimiento», sentencia Mario Rey.