Un abuelastro, a juicio por abusar de su nieta de 8 años

Según se recoge en los escritos de acusación presentados por la Fiscalía y la acusación particular, que en este caso ha sido llevada por la abogada pacense Alicia Correa, el procesado aprovechó su cercanía con la niña –era nieta de la pareja del acusado– para «de modo recurrente y sistemático» realizarle tocamientos aprovechando los momentos en los que se encontraban solos.

Creen las acusaciones que para consumar estos hechos cautivó la voluntad de la niña realizándole regalos, en algunas ocasiones, o amenazándola con que tomaría represalias contra ella si no accedía a sus deseos.

Esos hechos habrían tenido lugar a partir del año 2011, cuando la niña solo tenía 8 años de edad, y se habrían prolongado hasta el año 2017, cuando tenía 18. En un primer momento habrían consistido en tocamientos pero más adelante también en penetraciones.

Ha explicado la abogada que lleva la acusación particular que cuando la madre de la víctima tuvo conocimiento de lo sucedido ofreció todo el apoyo a su hija porque también ella, cuando era niña, sufrió hechos semejantes por parte del procesado.

Frente a esta versión de los hechos está la del acusado, que negó ante el tribunal las acusaciones que pesan contra él. «En nuestro caso pedimos la absolución», adelanta el abogado defensor, Fernando Cumbres, quien cree que los informes realizados por los especialistas no son suficientemente concluyentes.

En el escrito de acusación se recoge que la denuncia fue presentada por la joven en el año 2022, cuando tenía 20 años. En ese momento ya había protagonizado varios intentos de autolisis (se había causado lesiones a sí misma) y «presentaba un cuadro de recuerdos angustioso y estresante» a causa de las agresiones sexuales, según recoge el escrito de acusación.

Tras el juicio celebrado este martes en la Audiencia Provincial de Badajoz, tanto la Fiscalía como la acusación particular mantienen la acusación y piden que el procesado sea condenado a 15 años de prisión por perpetrar un delito continuado de agresión sexual sobre una menor de 16 años. Solicitan que los hechos sean juzgados con la nueva ley de agresiones sexuales que se aprobó en 2023.

Piden las acusaciones que a la pena se prisión se sume una orden de alejamiento y de prohibición de comunicaciones con la víctima que esté vigente durante por un tiempo superior en cinco años a la pena privativa de libertad y que durante ese mismo período se le prohíba realizar cualquier tipo de actividad o profesión que suponga contacto con menores de edad.

Igualmente solicitan que haga frente a una responsabilidad de 30.000 euros por los daños morales y físicos causados.