Pilar Lucio insiste en que fue su Consejería quien denunció

La consejera de Empleo e Igualdad de la Junta de Extremadura, Pilar Lucio, aseguró ayer que el vigilante de seguridad que propinó los golpes al interno ha sido apartado del módulo donde está ingresado el joven.

De este modo explica la actuación de su Consejería tras hacerse público en hoy.es el contenido parcial del vídeo donde aparecen los cuatro vigilantes de seguridad que sujetaron y golpearon repetidamente a un interno ingresado en el módulo de contención del centro de menores.

Lo dicho por la consejera contrasta con lo expresado por la Junta de Extremadura el pasado 18 de agosto, cuando reconoció que no había tomado ninguna medida tras la denuncia de los hechos por parte del joven.

Dos meses después, Lucio asegura que el principal responsable de la agresión (el vigilante que empuñaba la porra y que lanza su mano contra la cara del menor) ha sido llevado a otro módulo.

Esta afirmación ha sorprendido a los trabajadores del centro, puesto que esa persona seguía siendo ayer por la mañana el encargado de coordinar a los 30 vigilantes de seguridad que trabajan en el Vicente Marcelo Nessi.

Reducción

Pilar Lucio ha insistido en que la agresión denunciada por el joven se produjo cuando los vigilantes lo «reducían» y aseguró que lo ocurrido «forma parte de un procedimiento habitual cuando hay que reducir» a un interno. En cualquier caso, no valoró las imágenes difundidas con el argumento de que el caso se encuentra «bajo investigación judicial».

Una nota posterior remitida por la Consejería de Igualdad y Empleo ofrecía un detallado relato de los hechos ocurridos el día 27 de julio. «Ante la resistencia activa y evidente agresividad mostrada por un joven internado, debieron utilizarse medios de contención legalmente autorizados, que consistieron en el uso de defensa de goma y sujeción mecánica mediante grilletes».

La nota añade que por estos hechos se incoó el correspondiente expediente disciplinario al interno, dando cuenta de ello a la Fiscalía y al Juzgado de Menores de Badajoz. «El Centro ofreció el mismo día el amparo correspondiente al joven de cara a facilitarle la interposición de una denuncia si éste llegase a apreciar vulnerados los derechos que le asisten, rechazando el interesado iniciar acciones legales».

La Junta asevera que «el día 10 de agosto el interno solicitó entrevistarse de nuevo con el director para transmitirle su deseo de denunciar, momento en el que la dirección dispone los medios necesarios para la redacción de tal denuncia, y dando traslado inmediato del testimonio del interno al Juzgado y Fiscalía de Menores de Badajoz. Asimismo, dos días después el interno presenta escrito de denuncia que se envía al Juzgado de Guardia».

La nota indica que hasta el pasado viernes 23 de octubre la Junta no ha recibido del Juzgado de Instrucción nº 2 de Badajoz un escrito de diligencias previas por el que se solicita información referida a los hechos acaecidos el pasado 27 de julio, remitiéndose el correspondiente informe».

Desde la Consejería de Igualdad y Empleo se añade que, con independencia de las actuaciones legales realizadas, se ha instado a la empresa de seguridad a la apertura de una investigación sobre la actuación denunciada por el interno, así como otras acciones disciplinarias contra los trabajadores si así se considerase oportuno.

De momento, la dirección del centro de reforma de menores, en coordinación con la Dirección General, han acordado como medida cautelar, pendiente de la investigación judicial, que el vigilante denunciado no tuviera presencia activa en el Módulo Terapéutico donde convive el joven denunciante.

Guarda silencio

Quienes no se han pronunciado aún son los responsables de Ceres, la empresa de seguridad que tiene encomendada la vigilancia del centro de reforma de menores delincuentes Vicente Marcelo Nessi.

La plantilla de guardias jurados está compuesta por 30 profesionales. Según denunciaron los padres del menor, el principal responsable de la agresión es el coordinador de toda la plantilla.

Personal del centro confirmó ayer que ese trabajador había estado en el Vicente Marcelo Nessi hasta las tres de la tarde y añadieron que su puesto de trabajo no está en el módulo terapéutico, sino en la sala de control de las cámaras instaladas en las distintas dependencias del centro.