El indulto de presos, una tradición olvidada en la Pasión cacereña
Hermandades ·
La Cofradía de los Ramos, impulsora de esta iniciativa en la capital cacereña, no renuncia a recuperar en un futuro este ritual que eliminó de su procesión del Cristo del Perdón en 2018En 2007 la Cofradía de los Ramos, el Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Esperanza recuperaba una tradición que se remontaba en esta hermandad a la década de los 50 del siglo XX, la liberación en la época de Semana Santa de un recluso del centro penitenciario de Cáceres. Desde esa fecha hasta 2012 los hermanos de esta Cofradía fueron celebrando este singular ritual en el que se escenificaba el rescate del preso en la plaza de la Audiencia para sumarse a continuación a la procesión del Martes Santo con el Cristo del Perdón.
Se da la circunstancia de que el Boletín Oficial del Estado publica este miércoles los indultos que el Consejo de Ministros ha concedido a nueve reclusos, algunos de ellos como respuesta a las solicitudes de Cofradías españolas.
Se trataba de una ceremonia que despertada interés y curiosidad entre el público de las procesiones, que acudía a esta plaza a presenciar este acto en el que el recluso se beneficiaba de este perdón. En el caso de Cáceres, no recibía el indulto, como en otras ciudades, sino que se le concedía el tercer grado, para lo que debía reunir tres requisitos: haber cumplido dos tercios de la condena, buen comportamiento en el centro y no estar condenado por delitos de sangre o que causen alarma social.
Pero en 2018 la Cofradía adoptó la decisión de suprimir este antiguo rito que no descarta retomar los próximos años, según ha manifestado a este diario su mayordomo, Luis Manuel Rodríguez Parra. El cofrade señala que los trámites para gestionar la salida del recluso eran «muy complejos», por lo que la hermandad prescindió de esta ceremonia que obligaba también a reorganizar el itinerario de la procesión para hacer la parada en la Audiencia.
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«Pero no renunciamos en un futuro a esta tradición que iniciamos en los 50 y ha sufrido diferentes altibajos», afirma Rodríguez, que recuerda que la procesión del Martes Santo saldrá a las 20.30 horas del templo de San Juan con su formato actualizado discurriendo por Intramuros para detenerse en los conventos de clausura de Santa Clara, las Jerónimas y San Pablo. Durante la procesión, ha anunciado, se irá rezando un Vía Crucis a cargo de la organización católica Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Desde que lleva como director de la cárcel Nahum Álvarez, no se ha gestionado ningún indulto a petición de una Cofradía cacereña. Álvarez admite que para este año ya sería prácticamente «imposible» por los trámites que conlleva.
Según indica, la petición de indulto la puede solicitar cualquier persona u organización, como es el caso de las Cofradías de Semana Santa. Éstas son las que proponen los nombres de los reclusos, que después son valorados por la junta de la prisión. «Se viene haciendo tradicionalmente en otras prisiones y técnicamente el indulto lo puede pedir cualquiera», subraya Álvarez, que dirige el centro penitenciario cacereño desde 2019, aunque ya había ocupado este cargo con anterioridad.
En la Semana Santa de 2007, cuando la Cofradía de los Ramos rescató este ritual, fue liberado un preso cacereño de 42 años que cumplía una pena de dos años y 15 meses por violencia física, quebrantamiento y maltrato familiar, un delito por el que actualmente no habría sido propuesto para este proceso, por la concienciación y condena social de hoy a cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar y sobre la mujer. El hombre cumplía dos tercios de su condena en fechas cercanas a la procesión y pasaba a la libertad condicional.
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