Batidas contra las termitas en el Vostell

La consejera de Cultura, Nuria Flores, es la presidenta del consejo rector del Consorcio Museo Vostell Malpartida. Como tal, autorizó el pasado día 18 de noviembre la aprobación del expediente para abordar un problema que se pretende atajar antes de que vaya a más.

La cuestión de fondo, como detalla en la memoria técnica el director del museo, José Antonio Agúndez, es que «ante la presencia de termitas en los edificios que conforman las instalaciones del museo se hace necesario actuar ante esta plaga mediante un tratamiento».

Es en el propio documento en el que se utiliza el término 'plaga' de forma textual. Sin embargo, a consultas de HOY, desde la Junta de Extremadura se avanza que aunque se va a intervenir, sin fecha definida todavía eso sí, el plan de choque que llevará a cabo una empresa especializada no supondrá que se tenga que cerrar el museo a los visitantes.

Si atendemos a lo que dice el diccionario de la Real Academia de la Lengua (RAE), una plaga es la «aparición masiva y repentina de seres vivos de la misma especie que causan graves daños». En esos términos podría deducirse que el museo fundado en octubre de 1976 por el célebre artista hispanoalemán Wolf Vostell corre algún riesgo. No obstante, la Consejería de Cultura asegura que se trata de «trabajos preventivos en el perímetro del museo debido a la presencia de termitas», corrobora. Para ello se acudirá a una empresa que cuente con profesionales en esta materia. Se ha reservado una partida inicial de unos 45.000 euros. El plan se ejecutará a lo largo de cinco años, pero «todavía no hay fecha concreta para su inicio, dependerá de la firma del contrato una vez adjudicado el servicio», aclara Cultura.

La intervención prevista contra las termitas del Vostell se desarrollará hasta el año 2026. Para este ejercicio ya se han presupuestado 22.297 euros con la contratación de la empresa especialista. Se llevará adelante la llamada 'fase 1'. En los siguientes, el coste se elevará a algo menos de 4.500 euros anuales, hasta completar esos 45.000.

Se va a actuar, según la memoria técnica del proyecto de prevención, desinfección y control de las termitas, con un tratamiento «consistente en la instalación de cebos inhibidores del crecimiento». Ese plan está considerada al mismo tiempo «el más respetuoso con el medio ambiente», se remarca.

Dentro de esa batida de eliminación de la plaga de termitas que afectan al complejo del museo, el adjudicatario deberá presentar un plan de erradicación y de actuación detallado. En el mismo se describirán y especificarán las operaciones que va a realizar, además, de forma pormenorizada.

La empresa colocará los cebos en los edificios del museo y hará previamente una labor de inspección «mediante la observación del lugar a tratar, realizando la monitorización para detectar el grado y tipo, diagnóstico de la situación», identificación de las especies localizadas, densidad que tienen y los «factores ambientales que originan o favorecen la proliferación de las mismas».

Según explica el Vostell en su página oficial en Internet, este museo incluye tres colecciones de arte contemporáneo: la colección Wolf y Mercedes Vostell, la Fluxus-Donación Gino Di Maggio y otra de Artistas Conceptuales.

Tiene, además, el Centro de Interpretación de la Vías Pecuarias e Historia del Lavadero de Lanas. Se ubica en un lugar idílico en plena naturaleza, en el paraje de Los Barruecos.

El Vostell Malpartida está considerado «uno de los más importantes museos europeos de vanguardia y se ha convertido en tribuna obligada dentro del panorama artístico nacional e internacional», incide en su descripción.

La preocupación adicional puede llegar por la presencia de algunos elementos de madera que sean atacados por las termitas. Estos insectos son muy temidos, no solo por sus efectos en la madera sino también en estructuras y otros elementos. Son similares en su forma a las hormigas y suelen actuar de forma coordinada y muy organizada en entornos de humedad y temperatura ambiente cálida en los que construyen gramiteros.

La actuación «no implicará el cierre del centro al público», insisten desde la Consejería de Cultura.