Modo oscuro
Las colinas de la ermita se volvieron a llenar de pañuelos blancos.
El primer porte de la Virgen, con Pizarro, viró peligrosamente.
Miles de romeros disfrutaron de un día casi preveraniego.
La insignia ya no se besa, sino que solo toca las frentes.
La gran novedad de la romería fue el directo de una gran orquesta.
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