Ferias para peques y mayores en Plasencia

Plasencia está disfrutando de unas Ferias cargadas de alegría, color... y de generaciones. Aunque en los corrillos de la Plaza se hable de cañas, charangas y conciertos, en otros puntos de la ciudad las Fiestas tienen un alma distinta: la que late en los pequeños y también en quienes han vivido muchas Ferias a lo largo de su vida. La ciudad no se olvida de quienes la inician ni de quienes la sostienen con su memoria.

Este viernes, por la mañana y por la tarde, La Isla se convirtió en un parque de ilusiones con motivo de la Feria Infantil. Castillos hinchables de todas las formas, globoflexia, tatuajes temporales y pintacaras llenaron de magia el entorno. Este año, el menú infantil llegó con sorpresa: un rocódromo de más de nueve metros desató la emoción de los más intrépidos.

Además, en un gesto que habla bien de la sensibilidad de la organización, se habilitaron franjas horarias sin música, para que niños con autismo o hipersensibilidad auditiva también pudieran sumarse al festejo sin barreras. Esa medida también se está trasladando al ferial. Sin embargo, entre los comentarios de madres y padres hubo una queja recurrente: se echó de menos un puesto de bebidas que aliviara el calor y facilitara una jornada más cómoda para todos.

Y es que las altas temperaturas marcaron el ritmo de la jornada, provocando que los placentinos se incorporaran más tarde de lo habitual a los eventos. Desde las cañas en la Plaza hasta el ambiente del ferial, pasando por la verbena sénior, el termómetro decidió que la fiesta arrancara con más calma.

Por la tarde, los adolescentes tienen su refugio festivo en El Búnker. De seis de la tarde a medianoche, la caseta municipal se transformó en un universo sin alcohol, pero con karaoke, consolas, toro mecánico y muchas risas. Allí se encontraron quienes aún no tienen edad para la caseta nocturna, pero sí muchas ganas de vivir la fiesta.

Pero si hubo un momento lleno de encanto y emoción, fue al caer la noche, cuando la Verbena Sénior tomó la pista de la Coronación. Sillas bien dispuestas y una pista lista para los pasos de quienes nunca han dejado de bailar. Bajo la música de Charly Music e Isi Cobos, los mayores se reencontraron con canciones de siempre y algún que otro bolero. Risas, abrazos, y esa elegancia pausada con la que solo ellos saben celebrar.

• Temas
• Plasencia