Dónde salir a cenar en Extremadura sin romper la dieta

Exploramos restaurantes extremeños con opciones saludables y sabrosas, según las recomendaciones de dos nutricionistas

Alba Baranda

Viernes, 24 de enero 2025, 20:01

Comer fuera de casa no debería estar reñido con mantener una alimentación equilibrada y saludable. Pero lo cierto es que en pleno auge de la hamburguesa, en muchas cartas predominan opciones calóricas con el fin de ensalzar el sabor del plato. Por eso, como sabemos que enero es mes de propósitos e implementación de nuevos hábitos, hemos hablado con profesionales de la nutrición para que nos cuenten qué comer en un restaurante sin desviarse de una alimentación equilibrada.

«Lo más importante es disfrutar, especialmente si es una comida fuera de casa puntual». Es la máxima de Cristina García-Toriello y Celia de la Vega, fundadoras de 'The New Gut', un proyecto de nutrición que entiende la salud de manera integral, promoviendo buenos hábitos de vida y apostando por la educación nutricional y las dietas adaptadas a cada paciente. Ambas son farmacéuticas, nutricionistas y están cursando el máster en psiconeuroinmunoendocrinología.

Cristina García-Toriello y Celia de la Vega han creado el proyecto de nutrición 'The New Gut'.

Aseguran que es importante distinguir el hambre emocional del hambre real («si te comerías un plato de lentejas, es hambre real»), ya que Celia y Cristina abogan por una alimentación consciente, esto es; tener presente que estamos comiendo, masticando, hacerlo tranquilamente y, a ser posible, sin pantallas de por medio. Para evitar tener ansiedad al llegar a un restaurante, recomiendan tomar a media mañana frutos secos o una pieza de fruta.

Y, una vez allí, aconsejan buscar un plato equilibrado en el que predominen las verduras, pero que también tenga grasas, proteína e hidratos de buena calidad. «La verdura es imprescindible porque es muy saciante, tiene fibra, muchas vitaminas y ayuda a regular los picos glucémicos», indica Celia. Por otro lado, Cristina apunta que la variedad es importante, así que «cuanto más color haya en el plato, mejor».

Así mismo, es interesante priorizar las cocciones menos calóricas, como a la plancha, a la parrilla, o incluso alimentos hervidos. «El aceite de oliva virgen extra es una grasa de muy buena calidad, pero el que utilizan en algunos restaurantes no sabemos cómo es y cómo de limpio está, así que es mejor evitar frituras». También apuntan que, de ser posible, sería ideal pedir la salsa aparte. Y algo fundamental: evitar el consumo de alcohol. Dos alternativas más festivas que estas profesionales proponen son el agua con gas o la cervezas sin alcohol, de las cuales cada vez hay más variedad.

Aterrizando todos estos consejos sobre el papel, encontramos en casi todas las cartas de los restaurantes pollo con ensalada, parrilladas de verdura, arroces, pescados a la brasa o incluso, traspasando nuestras fronteras gastronómicas, el poke hawaiano, que aseguran que es un plato muy equilibrado, ya que normalmente se puede elegir la base (quinoa, arroz integral, mézclum de ensaladas...); la proteína (tofu, pollo, atún, salmón, pulpo...) y, por supuesto, los toppings, donde el abanico es mucho más amplio: piña, edamame, zanahoria, rabanitos, maíz, pepino, cebolla, kale... En definitiva, son una comida sin azúcares añadidos ni ultraprocesados ni fritos. City Poké, en Badajoz, ofrece, además, la posibilidad de incorporar semillas y aromáticas, y tiene salsas interesantes como de naranja y miso, de manzana verde picante, de soja (también sin gluten), de mango, etcétera.

En la misma línea, Mahalo Poké, en Cáceres, incorpora espinacas baby a la base y permite pedir cola de langostino como proteína, además de los ya mencionados anteriormente. En salsas tienen la vinagreta clásica, de mostaza y miel, ponzu, mayonesa picante, de trufa... Además de los clásicos toppings, ofrece una interesante lista de complementos, con ingredientes como crujiente de tempura, guisantes de wasabi, jengibre, huevas de masago o cacahuete.

En Mérida, Shangri-La, conocido como «el vegetariano», tiene una propuesta de ensaladas de lo más interesante. Además, ¡ofrece medias raciones! Desde la de la casa, con brotes verdes, manzana roja, aguacate, semillas de chía, vinagreta de mango y mozzarella, hasta la ensalada Tina, con fresa, piña, manzana, pipas peladas, queso havarti y vinagreta de fresas, pasando por otras deliciosas combinaciones, incluso templadas. Y quien quiera complementar con una buena fuente de proteína vegetal, este restaurante tiene un delicioso fricando de seitán con almendra y setas.

Imagen principal - En Shangri-La lo que no faltan son las verduras. ¡Pero tampoco el sabor! — En Shangri-La lo que no faltan son las verduras. ¡Pero tampoco el sabor!

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Imagen secundaria 2 - En Shangri-La lo que no faltan son las verduras. ¡Pero tampoco el sabor!

También ofrece opciones alternativas a una comida pesada Mentha Honest Food. Sus propietarios aseguran que simplemente proponen un producto de buena calidad y lo más fresco posible, ya que uno de sus principales objetivos es que sus platos sienten bien al estómago. Acciones como evitar freír o utilizar masas integrales de harinas ecológicas molidas a la piedra lo hacen posible.

De hecho, esta es la masa habitual de sus pizzas, aunque a veces también tienen sin gluten. Una de las que despuntó desde sus inicios fue la Truffata, que lleva salsa de tomate frito trufado, mozzarella, un huevo cuya yema hace las veces de salsa, aceite trufado, rúcula y jamón, una combinación de ingredientes bastante agradecida.

Otro ejemplo es el cachopo. Con carne de carnicerías Cerrato, lo rellenan de jamón y queso, lo empanan en panko (una especie de pan rallado japonés sin gluten) y se cocina al horno, en lugar de frito. Igual de crujiente y muy fundente.

Arroz chaufa

Si algo caracteriza a Newen es su capacidad para fusionar tradición y creatividad en cada plato. Su arroz chaufa, originario de la gastronomía chifa (peruano-china), combina ingredientes frescos y equilibrados, adaptándose a estas especificaciones nutricionales sin perder su esencia más pura. Se trata de un arroz hecho al wok con aceite de sésamo y salsa sillao (baja en sodio) y acompañado por verduras al dente como cebolla morada, cebolleta china, jengibre, setas... Nunca faltan los brotes verdes y últimamente, su chef, Dany Dorado, está incorporando tallos frescos de hinojo, que aromatizan y aportan un sutil aroma y un matiz muy mediterráneo a esta receta equilibrada y llena de sabor.

En definitiva, comer fuera sin desviarse de una alimentación equilibrada es posible si sabemos qué buscar en la carta. Y aunque cada vez más restaurantes ofrecen opciones que combinan salud y sabor, no pasa absolutamente nada por zamparse una hamburguesa si es esporádicamente y disfrutándola muchísimo. ¡Buen provecho!