«Los gobiernos de España han pensado más en invertir en la frontera que Portugal»

Sereno, el veterano político recibe a HOY en su casa. Vive en una quinta con toda su familia, sus tres hijas y cinco nietos incluidos. Amante de la naturaleza, tiene gamos y avestruces que se ven desde la carretera que da acceso a Elvas desde España.

Muy deportista, nada a diario una hora en el pabellón cubierto que tiene en el jardín. Con 19 años, jugando en Lisboa como futbolista, se le «quebró la pierna». Pero a este inspector de Educación retirado le sigue gustando el ejercicio. En el salón donde realiza las reuniones de trabajo, con una gran mesa de comedor de madera, un bar al fondo, una chimenea de piedra y sofás de piel, José Antonio Rondão Almeida responde en portugués cada pregunta en español.

–Es usted alcalde otra vez, con 77 años, ¿tiene ganas de meterse en este berenjenal?

–Para mí, la política es un servicio público. Ser hoy presidente de la cámara municipal es igual que ser presidente de una empresa o una institución de solidaridad social. El objetivo es servir mientras Dios continúe dándome salud, fuerza física y mental.

–¿Por qué ha ganado?

–En los últimos cuatro años sentía que el poder institucional no estaba acertando. Nuno Mocinha nunca fue una persona de gran simpatía. Un presidente no puede volver la espalda a su pueblo. Yo fui presidente durante 20 años y cogí el PS con un 18% de apoyo y lo dejé con el 75%. (El domingo obtuvo el 31%).

–¿Por qué ha perdido Nuno Mocinha?

–Metió dentro de la cámara municipal a sus partidarios y para mí eso es incorrecto. Un político debe estar abierto a toda la sociedad y no solo a los suyos. Cuando tome posesión veré como encuentro los cuadros financieros y administrativos. Pero no temo la situación financiera.

–Dicen en Elvas que usted ha ganado porque ha azuzado el fantasma de Chega!.

–Existe CH porque los gobernantes no han dado respuesta a los grandes problemas que se viven en nuestros días. Los principales responsables de que surjan partidos radicales son las políticas incorrectas para atender las necesidades de la sociedad y las empresas.

–Pero insisten en que usted fomenta los subsidios sociales y que ha usado el miedo a que CH los quiere quitar.

–Si hay pobreza deben existir apoyos sociales. Aunque no basta con eso, sino que hay que saber dar apoyo a quien lo necesite. Y, también, respetar el dinero de quien trabaja, que es donde el gobierno busca los impuestos.

–¿Qué quiere hacer?

–Con los fondos europeos que van a llegar debemos ayudar a arreglar problemas de nuestra sociedad en tres pilares: empleo, vivienda y salud.

–¿En qué se va a traducir?

–Para el empleo hay que aprovechar la ubicación estratégica de Elvas en la Península Ibérica, como le ocurre a Badajoz, entre Lisboa y Madrid. Hay que potenciar el aeropuerto de Badajoz y mejorar las infraestructuras ferroviarias y de carreteras. La Plataforma Logística del Suroeste Europeo, en su día, la promovimos el alcalde Celdrán y yo con la colaboración del representante del Gobierno extremeño, Ignacio Sánchez Amor, y se decidió que la plataforma fuera a los dos lados de la frontera. Hoy tenemos toda la plataforma logística en Badajoz y queremos complementarla. Por eso vamos a promover un gran suelo industrial de la zona portuguesa.

–En su primera campaña de 1993 ya hablaba de crear un área industrial en un área especial de entre Elvas y la frontera de Caya.

–Tenía visión de futuro. Extremadura y esta zona del Alentejo estaban muy atrás con respecto a Europa y sentí que era necesario mirar hacia América y África a través de la distribución de productos. Pero los gobiernos de España han pensado más en eso que los portugueses. Se ve en que Mérida es la capital administrativa, pero como está a 80 kilómetros de la frontera, invirtieron en Badajoz. Y eso fue por la frontera. Sin embargo, Portugal lo invierte todo en Évora, que está a 80 kilómetros de Elvas. Cuando Elvas está en la frontera. España ha intentado captar todo el negocio. Se ve en la ubicación del centro comercial El Faro, el hospital Universitario y el desarrollo de esa zona. Cuando llegué en 1993 empecé a mover este asunto y se decidió que la estación de mercancías estaría en Elvas y la de pasajeros en Badajoz. Es incomprensible que la cámara municipal de Elvas y Nuno Mocinha, con el gobierno portugués, hayan dejado caer lo que estaba consensuado.

–¿Cree que los elvenses han castigado eso?

–Los elvenses han llegado a la siguiente conclusión: Rondão Almeida es un presidente que defiende a los elvenses, incluso si tiene que ir contra su partido o contra el Gobierno.

–¿Echa de menos al PS?

–Era militante desde los años 70 y fui uno de los responsables máximos del partido en Évora, donde estuve 20 años antes de ser alcalde otros 20 en Elvas. Abandoné al partido en 2014 por no compartir la forma de hacer política dentro de nuestro país.

–¿Ve mucha diferencia entre antes y ahora?

–La política va empeorando. Los grandes líderes tienden a desaparecer y los nuevos viven la política como profesión y no como servicio público.

–¿Ha hablado con Nuno Mocinha desde las elecciones?

– No.

–¿Le ha llamado el alcalde de Badajoz o Vara para felicitarle?

–No, el alcalde no me ha llamado. Y Vara, aunque es amigo, posiblemente se haya olvidado o tenga mucho trabajo. Cuando tome posesión, hablaré con él. El que sí me ha llamado es Ramón Rocha.

–Pues justo Olivenza no está en la eurociudad.

–Voy a hacer todo lo posible porque Olivenza esté en esta eurociudad.