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El grupo de gaiteros de Orense se trasladó para acompañar al patrón de la ciudad hermana. :: G. C.
La romería  de San Marcos,  una tradición cada vez más arraigada
ALMENDRALEJO

La romería de San Marcos, una tradición cada vez más arraigada

Jóvenes, niños y mayores que acompañaron ayer al santo demuestran cada año que la costumbre sigue patente

GLORIA CASARES

Sábado, 26 de abril 2014, 18:55

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A pesar de que en vísperas el tiempo asustó a más de uno, al final, como en la copla más conocida de San Marcos, los romeros se salieron con la suya y el sol lució para que el santo de los campos de Almendralejo pudiera salir en procesión.

Así, ayer los hermanos se resarcieron del día de la convivencia, cuando el santo no pudo llegar a la iglesia de San Roque en procesión por la lluvia. Con las mismas ganas de sol que de romería y de festejos, los almendralejenses celebraron el día con ánimo, cánticos y risas, que animaron el camino de San Marcos desde primeras horas, cuando se concentraron en los alrededores de San Roque.

El sonido vigoroso y peculiar de las gaitas del grupo de gaiteros de la Diputación de Orense, que se trasladaron para acompañar al patrón de la ciudad hermana, puso la nota peculiar en esta romería. Esta original nota de color y guiño a la ciudad hermana de A Rúa destacó desde primera hora en la procesión y también en la llegada del santo a la ermita. Allí, los gaiteros hicieron piña con los miembros de la Asociación Cultural y Folclórica Tierra de Barros, vestidos de extremeños, para cantar al unísono el folclore de esta tierra. Con él recibieron al santo en torno a media mañana, un santo que venía acompañado por un séquito de cientos, quizás miles, de romeros, la mayoría ataviados con el pañuelo rojo, que desde hace años caracteriza a los romeros de San Marcos.

Era el momento de mayor concentración de personas en la zona de la romería, para escuchar la misa del santo y la bendición de los campos por parte del cura. La liturgia contó con las canciones folclóricas del grupo 'Tierra de Barros'.

A partir de ahí comenzó ya la habitual dispersión de los romeros en las distintas zonas de la romería y también en las casas de campo que hay diseminadas por la zona. Es la forma de celebrar una romería que casi deja vacío el casco urbano durante unas horas.

La principal peculiaridad de la romería de este año ha sido la coincidencia con la entrada de un fin de semana. Este hecho ha obligado a organismos como Cruz Roja a incrementar sus efectivos humanos y materiales, ya que serán dos y no un día fuerte. Por ello, desde la asamblea local de Cruz Roja han dispuesto este año del nuevo equipo de emergencias, un albergue provisional, a modo de hospital de campaña, donde por desgracia tuvieron que ser atendidos algunos jóvenes como consecuencia de la excesiva ingesta de alcohol.

Algo similar ocurrió con las fuerzas y cuerpos de seguridad y, sobre todo, con la Policía Local, que también tuvo que doblar los recursos humanos para atender no sólo la noche anterior y el día de ayer, sino también la madrugada de este sábado, ya que muchos han prolongado la romería un día más. Sobre todo, porque también se celebró un concierto musical gratuito en la zona, lo que animó a muchos a seguir en la zona hasta altas horas de la noche.

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