Una decena de clubes molestos con la nueva Preferente amenaza con una rebelión

La división de la Preferente en tres grupos, lejos de calmar al fútbol modesto, lo enciende. Mientras la FExF da como «inamovible», en palabras de su directivo Pedro Rocha, la configuración de los tres grupos, al menos una decena de clubes muestran su rechazo y más de uno sopesa la opción de retirarse de la competición. Es más. Han constituido una asociación de clubes con la idea declarada de poder organizar su propia Preferente si la FExF no varía lo que consideran inmovilismo y rehace unos grupos «con sentido común y no confeccionados por el interés particular de dos o tres equipos», en palabras de Enrique Asensio, presidente del CD Burguillos.

Su club, junto al Fuente de Cantos, Monesterio, Ribereña, Oliva, Emérita Augusta, Nueva Ciudad son algunas de las voces discrepantes ante el resultado de los tres grupos, fruto de una reunión de una comisión de clubes que iba a ser informativa y que, por contra, resultó decisoria y en la que la opinión de tres equipos frente a la de dos impuso la configuración de una Preferente con 48 integrantes.

De esa reunión salió que los dos equipos emeritenses deban medirse a adversarios a 170 kilómetros de distancia (Navalmoral) y no a otros que están a cinco, como Don Álvaro y Calamonte; o que el Monesterio deba recorrer más de 200 kilómetros (sólo ida) a Herrera del Duque, en vez de ir a Los Santos (44 ). «Eso no se dijo en mayo. Se dijo que se hacía la Preferente para, entre otras cosas, ahorrar gastos de desplazamiento y así, desde luego, no se hace», añade Asensio, quien lamenta, además, que «nadie de la Federación nos atienda».

La dura realidad económica se agrava por la subida de la ficha en 12 euros para esta campaña y el adeudo de los Judex de la anterior. «Más de uno se está pensando no salir porque no le trae cuento. Y más de uno piensa que igual hay que hacer otra Liga», agrega Asensio.